CAPÍTULO 2

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"Es curioso cómo a veces se puede llegar a ser tan inconscientemente cruel"

Mario Benedetti.

Calypso

Tenerlo en la mira

—Sí mamita, me voy a cuidar tú tranquila, ¿Sí?

—¿Cómo quieres tú que yo esté tranquila sabiéndote ahí en medio la noche sola con estos asquerosos?

—Mamá, sabés que yo puedo sola ¿No?. Mira, para que te tranquilice, estoy con uno de las guardias que contrató Jemison.

Yo sé que está así por el miedo de perderme a mí también.

—Lo sé mi vida, pero no puedo dejar de preocuparme por ti, entiéndelo— saco las llaves del coche— además no quiero que te pase lo que le pasó a tu padre.

—Voy a estar bien, te lo prometo, y cuando llegue a casa te mando un mensaje.

—Mejor hágame una llamada y cuídate mucho por mi cariño.

Sale más como una orden que otra cosa.

—Vale mamita— salgo con mi cartera en la mano— te tengo que dejar.

—Te quiero hija.

—Yo a ti mamita.

Como todas las tardes, me encuentro en la entrada del casino Openshow de CN Town, donde todas las noches de sábado se reúnen los hombres más ricos, poderosos y mafiosos de la cuidada en busca de placer y más dinero.

La mayoría lo desmiente, diciendo que solo están para jugar y despegar mente, pero a mí no me van a tomar el pelo, sé que detrás de este juego está escondido cosas horribles y unas de ellas es lo que le hicieron a mi familia.

Se lo jure en su memoria que haría justicia cueste lo que cueste para que los responsables paguen.

Hace tres meses no sabía cómo hacer para formar parte del elite de este Casino, para poder entrar y salir como me pegue la gana sin que nadie se de cuenta de quién soy realmente. Hasta el día que me topé con un viejo amigo saliendo del gimnasio. Charlando, me hizo entender que su familia tenía un paso VIP para este mismo Casino, entonces para disculparse de su distanciamiento conmigo desde que me fui a vivir a España, inventó una historia creando una falsa identidad para hacerme pasa por una de sus familiares. Y vaya que nos funcionó muy bien el rollo.

Entrar fue fácil, pero integrarme en este mundo, fue otra historia totalmente diferente. Dicen por ahí que las mujeres finge a la perfección, corroboro esta afirmación, porque desde que he pisado este lugar, nunca he dicho o hecho algo real, todas mis palabras, mis acciones o mis sonrisas, siempre han sido calculadas antes de ser reproducidas.

Empecé como mesera con la ayuda de Gabriela. Mi estancia fue muy breve; casi nunca me fui a la sala VIP como lo pensaba mi amigo al darme el pase. Quise empezar vigilando todo y tener una idea de cómo se manejaban las cosas ahí. Entonces, siempre me tocaba a mí servirles a los clientes de afuera o en los balcones, pero nunca en la sala donde jugaban poker, con la excusa de que porque yo era muy torpe, y que sólo estaba en prueba, y que siempre me quejaba por todo. Era perfecto para mí, porque necesitaba estudiarlos a todos, afiliar bien mi plan antes de usar mi primer arma que había conseguido: Información sobre el dueño del lugar.

Mi presencia aquí hoy es primordial, será una gran noche y tengo que jugar bien mi carta o de lo contrario, no habrán servido de nada mis esfuerzos, no debo fallar hoy, por eso estoy sentada sobre el sofá, en medio de los dos hombres más mafiosos de la ciudad, luciendo más atractiva que nunca.

LA RULETA NEGRA [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora