Única parte

45 5 1
                                    

Era una noche templada, sin mucha brisa ni movimiento.


Lisandro estaba en su casa con sus amigos, se habían reunido para comer y charlar.


Conversaba con Emiliano, su mejor amigo. En realidad, el marplatense estaba haciendo un monólogo ya que el entrerriano se encontraba sumergido en sus pensamientos y fantasías.


Un rostro lo atormentaba últimamente y por eso no podía mantener el hilo de una charla ni la concentración. 


Cristian, su ex.


Aunque Romero había tenido actitudes horribles y poca responsabilidad afectiva, Martínez tenía una gran dependencia emocional hacía él.


Desde que el cordobés terminó la relación se la pasaba pensando en él y llorando.


Lo amaba demasiado, sin Cristian él no era nada.


— Licha, ¿me estás escuchando? — Preguntó Emiliano. Aunque ya sabía la respuesta que su amigo daría.


— Perdón Emi, me perdí. — Admitió un poco avergonzado — ¿Que decías?


— Que si necesitas que te lleve a tu casa después. Hoy tengo el auto y Mandi se quedó con los nenes. — Respondió el marplatense.


Lisandro volvió a ignorar a su amigo, su atención se fijó en su celular.


Comenzó a sonar y la pantallase encendió, era una llamada de Cristian.


-- Espérame un cachito, ya vuelvo. — Dijo el teñido y se fue rápidamente al balcón para poder responder tranquilamente la llamada.


Aunque lo que menos tenía ahora mismo era tranquilidad. Estaba nervioso.


¿Que le diría Romero?


Apuró el paso y al salir al pequeño balcón, una brisa lo sorprendió.


La noche estaba más fría y lloviznaba.


Atendió.


Sus manos temblaban pero aun así se pudo acercar el celular a la oreja.


— Hola Lisan. — Lo saludó una voz ronca.


Un escalofrío recorrió su espalda y le puso los pelos de punta.


— Hola. — Respondió tímidamente. 


— ¿Venís a mi casa? Quiero verte. — Dijo el cordobés.


Más que a una pregunta, sonó como a una orden.


El entrerriano se frustró, jamás podría decirle que no.

Bad idea right? | CutlichaWhere stories live. Discover now