Francis toma asiento en el sillón, mientras que Hoon lo sigue con obediencia. Espera sus instrucciones entretanto que el lechero se desabrocha un par de botones de su camiseta antes de hacerle una orden.
—Ven, súbete— Apunta a sus piernas que luego junta para tener mejor control.
El doppelganger hace caso sin cuestionarse, sentándose a horcajadas sobre él mientras lo observa con ciertos nervios.
—Vamos a ir calentando ¿Sí? Me gustan las cosas lentas— Agregó Francis antes de empezar a manosear el pecho de Hoon con movimientos circulares y rítmicos.
Tras comentar eso, lleva las manos hacia el cinturón del doppelganger y empieza a desabrocharlo.
—Eres un buen chico— Le Dice al observar lo bien que se está portando al no hacer nada más que quedarse quieto.
Francis le quita su cinturón y lo coloca a un lado. De nuevo mueve las manos empezando a levantar la camiseta del doppelganger un poco.
—Vamos, quítatela— Le dice con un tono algo autoritario.
El doppelganger empieza a desabrocharse la camiseta con impaciencia, es algo torpe pero lo logra, mostrando su torso al descubierto.
—Hoon hoon hoon...— Finalmente quita su camiseta y la pone a un lado, solo dejado su pajarita negra en su cuello.
Con sus manos, Francis le tira su sombrero que dice "lechero" el cual, no se había retirado ni para dormir u otra cosa.
—Me sorprende que aún lleves ese sombrero, podría usarlo como repuesto por si le pasa algo al mío...— Lo deja a un lado de las demás cosas y sigue manoseando su pecho.
—Pero como sea, te estás portando tan sumiso para mí, eso me encanta— Le sonríe con un gesto pícaro.
El doppelganger no puede evitar soltar un pequeño gemido al sentir su mano tocando más directamente su piel, pero siente aprobación por sus palabras y hacerle caso, además de que se lo reafirme Francis.
—Hoon hoon hoon hoon...— Su voz suena como un susurro suave
Sin embargo, un bulto se empieza a formar en el pantalón de Hoon y eso lo nota Francis en un instante.—¡Vaya, qué travieso!— Solo puede reír un poco por la sorpresa de que haya sido tan rápido excitarlo.
Continuando su gesto, procede a pasar las manos hacia abajo y colocarlas justo encima del bulto para acariciarlo.
El doppelganger no puede evitar un pequeño estremecimiento y salto por esa acción, eso solo hace que el bulto se vuelva más firme.
—¡Hoon hoon!—
Procede a respirar más pesado tratando de compensar su cúmulo de emociones, aunque lo oculta un poco para evitar molestar a Francis con eso.
Mientras sigue con su manoseo, el lechero le baja el pantalón con tal de ver su ropa interior y empezar a tocarlo de forma más directa, ahora con la palma de su mano.
—Shh... No hace falta que hables, solo disfrútalo—
—Hoon...— Finalmente deja de hablar y solo disfruta como le pidió. Su respiración sigue siendo pesada, obedecer y servir a Francis es lo único ene piensa.
Después de eso, le da un beso en el cuello, uno en el mentón y otro en su pecho.
—Sé buen chico y haz lo mismo— Añadió con un tono rasposo.
El doppelganger hace caso sin titubear y procede a pasar su lengua por su cuello de forma sugestiva pero con dedicación.
La saliva comienza a chorrear, aunque esto no le molesta al lechero, cierra sus ojos un poco disfrutando de la sensación.
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Tan travieso y dócil | Francis X Hoon
RomanceFrancis estaba en la monotonía de su vida hasta que llegó este peculiar doppelganger a demostrar que lo puede cambiar todo. Este encuentro le genera la idea de que puede usarlo como un juguete, pero conforme pasa el tiempo, se da cuenta de que puede...