Capítulo 03

738 94 38
                                    

Horas antes

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Horas antes

La música suave aún resonaba en la sala cuando Minho vio a Jisung desplomado sobre la barra, sus ojos cerrados en un sueño profundo. La fiesta de integración de vecinos había sido todo un éxito, pero ahora el lugar comenzaba a vaciarse. Minho observó cómo los demás se despedían y se iban. Aprovechando el momento, Minho se acercó y lo sacudió suavemente. No hubo respuesta. Decidió que no podía dejarlo allí. Lo levantó con cuidado, sosteniéndolo por los hombros, y lo sacó del lugar.

Inicialmente, Minho pensaba llevar a Jisung a su casa. Sin embargo, al estar en el camino, se le ocurrió que sería mejor llevarlo a la suya propia. Una vez en su hogar, pensó en dejarlo descansar en el cuarto de invitados, pero mientras lo cargaba, una idea diferente y más oscura cruzó su mente.

Con una precisión inquietante, sacó unas gruesas cadenas del armario. En lugar de la cama del cuarto de invitados, llevó a Jisung al sótano. Trabajó rápido y en silencio, encadenándolo a una silla robusta.

 Trabajó rápido y en silencio, encadenándolo a una silla robusta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

De regreso al presente

Jisung despertó desorientado, las cadenas frías rodeando sus muñecas. Sus ojos se ajustaron lentamente a la penumbra de la habitación. Intentó moverse, pero el sonido metálico de las cadenas lo devolvió a la realidad.

— ¿Quién eres? — preguntó Jisung, su voz ronca y temblorosa.

— Eso no importa ahora — respondió la figura enmascarada.

Jisung tragó saliva, tratando de mantener la calma.

— ¿Qué quieres de mí?

El hombre enmascarado se inclinó hacia adelante, su expresión oculta tras la máscara.

— Quiero muchas cosas, Jisung. Pero por ahora, quiero que hables.

Jisung frunció el ceño, confundido.

— ¿Qué quieres decir?

— Eres nuevo aquí — dijo el enmascarado —. Nadie sabe mucho de ti. Quiero saber tus secretos. Y no te preocupes, tenemos todo el tiempo del mundo.

Pequeña Obsesión - Minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora