La galaxia en llamas

Capítulo 51: El inicio del fin

Mientras las fronteras del imperio se expandian gracias a los esfuerzos del propio, terra imperialis envío a 2 de sus mejores generales para fortificar a las otras tierras y sus respectivos sistemas solares, aunque en las sombras, los ángeles oscuros y puños imperiales junto a espías recolectaban información de todo tipo, algunas cosas ya eran conocidas, como tecnología e historia, pero otras de alto secreto no tardaron en caer en manos del imperio, como la tecnología forerunner más avanzada y reciente de la ONI bajo alto secreto, la existencia de psiqui8en la Federación y una conexión mental fuera de la disformidad, los poderes psionicos e investigaciones sobre estos, todo era recopilado en secreto y enviado a terra imperialis.

Mientras que en esta, legiones de soldados que conformaban la nueva guardia imperial se alzaban en lo alto, listos para ser desplegados en los frentes más urgentes del creciente imperio, todo marchaba según lo planeado por el emperador, si el tablero había cambiado, el jugaría con las otras piezas con el mismo objetivo, ganar el juego de la humanidad.

Sin embargo, en lo más profundo del palacio imperial, dentro de la bóveda subterránea del palacio imperial, donde yacian las aberraciones más peligrosas de la existencia misma, el emperador, malcador y constantin valdor no solo ampliaban las celdas con nuevos miembros de otras galaxias, sino que a la par de esto, tejian un nuevo plan en base al nuevo terreno.

- Bien, si usamos la red de la telaraña para transportar mundos y flotas, podríamos comenzar con la primera fase de la colonización - Aclaro al emperador

- Así es, pero sugiero que primero se envíen avanzadillas y grupos de reconocimiento para saber a lo que nos estamos enfrentando mi lord - sugirió con astucia Valdor al plan del emperador

- Suena bien, ¿Qué tal los droides de Ferrus como carne de cañón?, después de todo, son chatarra de bajo costo y fácil producción - malcador se arriesgo con esta sugerencia, ya que el emperador de por si detestaba la idea de una ia como miembro del imperio

- No, Ferrus sospecharia bastante y mi límite con las máquinas ya esta al límite con el mechanicus -
dijo molesto el emperador mientras observaba un esquema de la telaraña Aeldari

- ¿Qué tal la guardia imperial?, he oído bastantes historias sobre regimientos como los lobos de la Federación o la mecanizada de Marte - Valdor estaba dispuesto a vender la carne de mil hombres por una hoja de respuestas ante su maestro

- No, necesitamos más potencia si queremos que sobrevivan lo suficiente como para traer información - cruel pero cierto

- ¿Enviara a uno de sus hijos mi señor, o acaso al ángel de la destrucción? - cuestionó Malcador mientras volteaba a observar el sarcofago del primer primarca creado por el emperador, viejos recuerdos de la edad más oscura de Terra

- No será necesario, Valdor, ve con tus mejores hombres y trae toda la información que puedas sobre ese lugar a cualquier coste - si de potencia se trata, Valdor sabía que era la cabeza del martillo ante el muro de oscuridad

- Luego de eso aplanaremos el terreno con expediciones de distintos regimientos, de ser necesario, enviare a algunos de mis hijos para ser la punta de lanza y abrir paso a los nuevos dominios de la humanidad, con eso estará lista la primera fase - sabio y audaz en todo momento

- ¿Y que sigue viejo amigo? - malcador sabía que había algo más en estos planes

- Luego comenzaremos con la ofensiva masiva, ordenare y de ser necesario guiare a toda la humanidad en una ofensiva imparable en todos los frentes hacia los mundos xenos principales, tomaremos toda la tecnología posible, PCE, armas xeno, uniremos a todos los remanentes de la humanidad posible - si el emperador guiaba una cruzada como esta con nuevos refuerzos, sería la avanzada más grande de la galaxia jamás antes vista