Azucenas

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"El mundo arde mientras Lucifer me acaricia."

Seishu se mira en el espejo con un quejido. El maquillaje le había irritado la cicatriz. La piel de ese lugar es sensible y susceptible a alergias, incluso por las sábanas y su propio cabello, el maquillaje la pone roja y hace que quiera rascarse. Se aplica un poco de crema humectante y luego escucha la puerta — ¿Ya despierta Akane? —.

— No soy Akane, pero sí — Kokonoi sonríe parado en el marco del baño.

— Koko — Seishu se sonroja. El sigue en pijama y sin bañarse, agradece que al menos ya se haya bañado la boca o se moriría de vergüenza.

— ¿Qué te pasó? — Kokonoi se aproxima de inmediato. Le toma la cara y revisa la cicatriz.

— No es nada, solo se puso un poco roja — dice sonriendo levemente y cubriéndola con la mano. Kokonoi le retira la mano y la acaricia. Es increíblemente delicado, las yemas de los dedos solo la rozan, la dibuja con cariño y Seishu podría derretirse, él está tocando su mayor inseguridad con una ternura que parece alabanza.

— ¿Puedo conseguir algo para aliviarla? —.

— Hielos —.

— ¿Que ocasionó la irritación? —.

— Muchas cosas —.

— Eso no es una respuesta —.

— El maquillaje, siempre la pone así, pero otras cosas como las mantas de lana la lastiman —.

— ¿Tienes mantas de lana? —.

— No —.

— Es por el maquillaje — Kokonoi suspira y le acaricia la mejilla — no quiero que lo utilices si te lastima, en ninguna de nuestras ceremonias y tampoco en el matrimonio —.

Seishu suelta una sonrisita. Es tonto pero esas palabras simplemente hicieron que algo ardiera en su interior. Ni siquiera piensa en decirle que no, que es su mayor inseguridad y que la cubrirá si a él se le da la gana, por su mente solo pasa la idea de obedecer la orden de su futuro esposo. Si a su pareja no le incomoda verlo así que los otros se jodan — gracias —.

— Tu rostro es muy bonito, no necesitas cubrir nada de él — dice Kokonoi. Le acaricia las mejillas antes de levantar su rostro y besarlo con suavidad. Las manos de Seishu se posan en sus hombros.

— Gracias. Deberías irte antes de que llegue mi mamá —.

— Sí, de hecho, vine a preguntar sobre eso —.

— ¿Qué quieres preguntar? —.

— Estaba pensando que ya que la celebración de tu familia se hace en la mañana nos quedaría tiempo libre el resto del día —.

— Al punto Kokonoi —.

— Quisiera que salgamos esta noche, te llevaré al pueblo cercano, es pequeño pero muy bonito, hoy tienen una pequeña celebración con faroles —.

— Me encantaría ir — Kokonoi sonríe y le acomoda el cabello. Él le besa la mejilla — vete ya, mamá debe estar por venir —.

Kokonoi asiente. Besa su frente y sonríe saliendo de la habitación. Seishu ríe nervioso. Al girar ve su cabello completamente despeinado en el espejo y la vergüenza corre por sus mejillas. Se cubre la cara y da un quejido. No se supone que su esposo lo viera así hasta después del matrimonio, según una de las empleadas de su casa, es de mala suerte.

[...]

— ¿Cómo estuvo? —.

— Akane no le dijo, no está molesto —.

— Te dije que no lo haría, ya hice control de daños —.

Matrimonio Concertado (kokonoi Hajime x Inui Seishu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora