Después de un corto viaje llegamos a un parque donde me dejó acomodar las cosas para luego sentarnos sobre el típico mantel, estando ahí saqué la comida para que pudiéramos empezar a comer
—¿Entonces la famosa cita era sentarnos aquí a comer?.— preguntó mientras comía un poco de fresas
—Estoy lastimada de una pierna.— recordé —No hay mucho que pueda hacer ahora pero me estoy esforzando.—
—Vas perdiendo puntos.— avisó y lo miré mal
—Debería ir ganando puntos porque estás comiendo sin quejarte.— discutí cruzándome de brazos y él rio
Antes de que pudiera responder escuché que su celular empezó a sonar, lo sacó y pude ver que se trataba de Osvaldo así que me miró como si me pidiera permiso para responder, yo asentí estando de acuerdo.
Pensé que contestaría aquí pero se levantó y se fue, mientras esperaba que regresara simplemente agarré un poco de comida para entretenerme al menos comiendo. Pasaron 5 minutos y aún no habían señales de Aldo así que agarré mi muleta para intentar levantarme pero era muy complicado así que me rendí
Otros 5 minutos más hasta que vi que apareció de nuevo para sentarse a mi lado
—Perdón, era algo importante.— exclamó, aún mantenía la vista pegada en su celular
—Está bien, no tengo problemas con eso.— sonreí pero parecía que me estaba ignorando
No quería quejarme pero él estaba más que concentrado en su celular, como si de un momento a otro yo hubiera dejado de importarle
—Por cierto.— intenté llamar su atención pero parecía imposible —Preparé un pequeño pastel esta mañana pero le quise quitar los bordes y quedó tamaño panquesito..—
Lo saqué para mostrárselo, era la primera vez que hacía o intentaba hacer algo de repostería pero me había quedado bastante bien. Podía ocupar mi tiempo para seguir aprendiendo sobre esto además de las pulseras que también quería hacer
—Mira, es de chocolate y...— seguí explicando, realmente estaba emocionada
Aldo aún seguía atento a su celular pero intentó hacer un movimiento con su mano para que le diera el pastel pero como no vio lo que hacía terminó tirando el pequeño pastel
—No mames.— por fin me miró y dejó su celular a un lado —Perdón.—
Mi mirada se pasó al pastel que había caído fuera del mantel, en la tierra del parque.
Había pasado la mayor parte de la mañana en eso, era cierto que había hecho más cosas pero eso era lo más importante... Me sentía frustrada; por un lado estaba molesta porque por no estar atento me tiró mi pastelito pero por otro lado me sentía triste porque ni siquiera alcanzó a probarlo
—Me siento triste cuando ni siquiera me prestas atención, porque ocurren cosas como esta que dañan mis sentimientos, me gustaría que cuando salgamos en citas no estés tan pendiente del celular.— exclamé intentando balancear lo que sentía
—Es que esto era mucho más importante, me estaba confirmando algo que haremos en nuestro viaje de la velada y...— empezó a hablar pero dejé de escucharlo
¿Realmente había dicho que eso era "más importante" que nuestra cita? sabía que no debía tomármelo personal pero causó una inseguridad en mí
—Igual aún tenemos otras cosas que hiciste ¿no?.— cuestionó sacando más comida, como si quisiera solucionar lo que había hecho
—Está bien, no pasa nada.— exclamé aunque debí poner un límite
—Bueno.— sonrió como si me hubiera creído —Mira, te voy a mostrar lo que haremos en la velada porque creo que es obvio que viajaremos juntos, me apoyarás y...— siguió hablando
Mi mirada de reojo se iba nuevamente al pastel que ni siquiera se esforzó por aparentar que quería recoger... ¿estaba exagerando por sentirme mal?
—¿Cuándo será el viaje a España?.— cuestioné
—Aún falta un poco, yo creo que para ese entonces ya estarás bien de la pierna.— respondió con una pequeña sonrisa
—Realmente quiero que el tiempo se pase volando.— murmuré y me miró confundido
Me había dado un bajón emocional y cuando eso pasaba siempre me enfocaba en el baile, ahora ya ni tenía eso así que necesitaba buscar en que más entretenerme para despejar mi mente
—¿Qué pasa?.— cuestionó —Siento que algo te pasa.—
—Nada.— respondí, ni siquiera sabía como expresarle porque de un momento a otro me había puesto tan mal
—Me gustaría saber si algo te pasa, creo que podría ayudarte si te sientes desanimada.— dijo
Tomé un poco de aire para ser honesta con él, probablemente me sintiera ridícula diciéndoselo pero eso ya no me importaba
—Yo realmente me imaginaba un picnic romántico, me esforcé incluso haciendo un pequeño pastelito con la ilusión de que lo probaras y que me dijeras que sabía bien. Sé que quizás no es el mejor plan para ti o que preferirías estar en cualquier otro lugar pero no era necesario que dijeras que algo era más importante que este momento.— expliqué —Me hiciste sentir mal y aunque sé que tú quieres darte valor no creo que sea bueno rebajar mis intentos para que me aceptes.—
Aldo pareció pensarlo por unos segundos
—Lo siento.— exclamó de nuevo —No quise decirte no era importante, fui un pendejo.—
—No pasa nada, solo quería sacar eso...— hablé pero me interrumpió
—No quieras quitarle importancia a tus emociones.— pidió y tomó mi mano —¿Quieres un picnic romántico? pues podemos tenerlo.—
Se acercó para dejar un pequeño beso sobre mis labios y después me miró sonriente, yo estaba sorprendida
—Sé que tu debes ser quien me declare su amor pero...— exclamó de repente —Me gustas mucho mi Roma y quiero que estemos juntos. Sé que aún tenemos mucho que aprender pero podemos hacerlo uno al lado del otro, quiero ser tu novio pero ¿tú quieres ser mi novia?.—
¿Realmente me estaba confesando de nuevo sus sentimientos? Sonreí aunque en el fondo sabía que solo lo había hecho para hacer que me sintiera mejor
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𝐑𝐎𝐌𝐀 [Aldo Geo X Tú]✓
Hayran Kurgu𝐑𝐎𝐌𝐀|| Donde _____, una bailarina algo egoísta con ella misma, busca cumplir su sueño en otra ciudad. O donde Aldo se enamora a primera vista en aquella Velada Inicio: 29-O4-24 🧂 Final: 11-O9-24 ✨