𝖂𝖎𝖈𝖐𝖊𝖉 𝕲𝖆𝖒𝖊 | robb stark

i. the king

[𝓦𝓖. 01]

❝ 𝐄𝐋 𝐑𝐄𝐘 ❞

La muerte de Fereodor trajo consigo una paz para Ravenna pero al mismo tiempo su partida traía un desorden a su mente.

Una vez que recuperó la consciencia, Ravenna no dejaba de soñar sobre múltiples cosas, algunas conocidas y otras desconocidas.

Sueños sobre la muerte de su padre, dragones, la muerte de Fereodor, lobos, hombres de hielo e incluso dragones de hielo.

No comprendía el motivo de estos sueños, creyó que era su imaginación que empezaba a desbordarse por culpa de los libros, pero lo que el parecía extraño eran los susurros y las frases que sonaban en su cabeza una y otra vez.

Al inicio era difícil manejar estos sueños y estas voces.

Se despertaba asustada y perdida, completamente desorientada. Algunas de las doncellas que estaban encargadas de cuidarla decían que incluso parecía primitiva.

Como si hubiese perdido la razón, ocultándose en cuclillas detrás de las cortinas y los tapices de su alcoba, rasguñando sus piernas y brazos mientras repetía una y otra vez incomprensibles susurros con la mirada vagando de un lado a otro como si tuviera miedo de que la atraparan.

Esto preocupó a Ned que en varias noches se quedaba a velar su sueño,angustiado al ver que todos creían que eran simples terrores nocturnos, pero Ned sabía que no eran solo eso.

A Ravenna se le dificultaba hablar sobre las imágenes en sus ensoñaciones, siempre que se le preguntaba hacer a de ellos contestaba con frases vagas e inexplicables.

Con el tiempo su actitud cambió, se había vuelto precavida y un tanto seria, siempre observando todo y a todos en cada movimiento que hacían, examinándolos. Únicamente dejaba salir su verdadera personalidad cuando estaba con sus Starks favoritos.

Catelyn, Sansa y su madre la evitaban, pero Ravenna estaba feliz con ello, los encuentros que solía tener con las mujeres eran incómodos y llenos de comentarios hostiles, por lo que prefería mantener su distancia para evitar problemas.

Pasó el tiempo y la Arryn aprendió a canalizar su miedo por estos sueños frente a otras personas, pero eso no significaba que no sintiera cierto pavor al cerrar los ojos durante la noche.

También empezó a entrenar a escondidas con Ned, escabulléndose de los ojos curiosos, ambos se dirigían a un lugar fuera del bullicio de la gente y empezaban a practicar con espadas de madera.

Tal vez Ned no fuera un experto en el arte de la espada pero se podría decir que sabía defenderse y eso es lo que el quería que Ravenna aprendiera, a defenderse sin la necesidad de depender de otros.