Capitulo 46

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Mattheo acariciaba el cabello de Cassiopeia con delicadeza, esta estaba durmiendo en su pecho mientras el fumaba un cigarro.

Había pasado exactamente una semana desde que se había convertido una niña, Cass le había revelado sobre que existía una cura, cura que solo tenía Kreacher.

El elfo no dudo en trasmitir el mensaje que ella misma había ordenado decirse.. confuso, pero a la vez simple.

En esa semana se aseguró de que cada miembro de la orden cayera a sus pies, primero empezó con Moody.

El hombre era gruñón pero muy peligroso, igual a su padrino de cierta forma. Las historias que le contaba eran entretenidas, contaba todo a lujo y detalles incluso los métodos de tortura que uso durante la primera guerra.

El señor Weasley era amable, respetuoso y divertido, su esposa.. bueno, la seguía odiando solo que fingía que no.

La mujer había llegado a encariñarse con ella, solo que la rubia no olvidaba la humillacion que le hizo pasar.

Sus hijos eran cosa aparte, no odiaba a ninguno realmente, Hermione le caía bien y Harry..

El sería un problema si se tomará en serio la profecía.

La única que parecía odiarla era Nymphadora Tonks, sabía el motivo y por eso mismo aprovechaba cada momento para besar la mejilla de Remus con cariño.

Después de todo era una niña verdad?

Con Sirius era diferente, su relación luego de unas horas fluyó con normalidad.

Hablaban en francés por horas, el Black la sentaba en su regazo y le leía libros de magia oscura, Walburga al no tener ninguna foto de Cassiopeia de niña le pidió a Kreacher que le tomara a ambos a escondidas.

Faltaba una semana para entrar a Hogwarts y por eso mismo hoy iría a la mansion Malfoy, para pasar esos últimos días con ellos.

Ya quería ver la reacción de Tom al verla..

Se había despedido de todos, Prometió buscar una "cura" junto a Severus en la biblioteca de su mansión.. a pesar de que nadie quería que se vaya, Mattheo con su semblante frío logro dejarlos en el molde.

– Nos vemos en Hogwarts.. – Saludo tímidamente.

Hermione se abalanzo a darle un abrazo, Ron le dio dulces para el camino, los gemelos Weasley le regalaron algunos artefactos de prueba, Ginny con sus ahorros le compro unos hermosos adornos dignos de un sangre pura, mientras que Percy le Prometió un recorrido en el ministerio y libros a cambio de que se cuide.

Arthur Weasley le dedico una sonrisa radiante, Molly le había hecho dos hermosos sueters al estilo de los Weasley, ambos verdes pero de diferentes tamaños, uno para el perro de la niña y otro para ella.

Alastor se limpio una pequeña lagrima del unico ojo sano que tenia, iba a extrañar a la mocosa.. en poco tiempo lo hizo reír y recordar el por qué ya no era parte del ministerio.
Incluso había revivido aquellos pensamientos crueles que hace tiempo no tenía.

– Si necesitas asesinar a alguien, ya sabes quien puede esconder el cuerpo por ti, de acuerdo? – Susurro como si fuera un secreto.

Cassiopeia tapo su pequeña boca fingiendo inocencia.

– Lo haré Moo! – le dio un pequeño abrazo.

Su mirada se dirigió a Remus, el lobo se agacho a su altura.

– Cuídate de acuerdo? Si necesitas algo- –

– Te llamare! – Exclamó feliz. – Vendré por ti! – Dijo soltando una risa infantil.

Too Sweet (Mattheo Riddle, T.R) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora