Progreso.

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Bruce Jenner (Papá)
¿Qué tal con Naomi, cielo? ¿Te ha dejado tu primera tarea ya?
9:23 a.m.

Bruce Jenner (Papá)
También, ¡buenos días, sol! Que tengas un excelente día hija mía. ❤️
9:25 a.m.

Kendall observó los mensajes de texto de su padre con total desagrado. La mueca en su rostro era palpable, y si Kylie estuviera con ella seguro tomaría una foto para burlarse entre ratos. Le contesta con un emoji de pulgares arriba y continua con su día.

¿Tenía la chica planes de realizar su tarea? Absolutamente no. Hacer un amigo completamente normal o adecuado para su gusto era algo difícil para Kendall. Por desgracia, Kendall se encuentra en desventaja ante la situación, no podía mentirle a su padre, no en este caso al menos, y... tenía una obsesión regulada, claro, con probarle a gente tan insoportable —como en este caso lo es Naomi para ella— que podía hacer todo lo que se propusiera y más.

¿El problema cual es entonces? Kendall no sabe dónde conseguir amigos. En la escuela era fácil, todos necesitaban aceptación social, todos menos ella, y aún así la obtuvo. Así que... ¿dónde conseguiría Kendall a este dichoso o dichosa individuo?

Por suerte tenía a solo un mensaje de distancia a Kylie, que conocía todos los bares del área en Londres. Así que al caer la noche simplemente se vistió sin prestar demasiada atención a los detalles y salió de su casa directo a un club/bar recomendado por su hermana menor AKA socialite profesional.

Ahora, Kendall se encontraba rodeada de gente que —rogaba por estar en lo correcto— rondaba en su edad. Sentada en el bar con algunas otras personas que guardaban su distancia igualmente, con un martini en la barra y su teléfono en manos.

Una mujer rubia y bastante delgada se sentó junto a ella peligrosamente cerca invadiendo un poco de su espacio, el lugar estaba casi repleto, a Kendall le sorprendió que no hubiera sucedido antes.

Ignoró a la mujer y continuó observando su teléfono. El último mensaje que Bella había enviado aún permanecía sin respuesta alguna, lo único que cambiaba en el chat, era que ahora el perfil de Bella tenía una fotografía.

Hizo zoom en la foto, extrañada de sí misma ante tal acción, sonrió ligeramente al ver el cabello castaño caer en su rostro de una manera casi planeada y también el enorme anillo que adornaba su mano, Kendall se imaginó...

— ¿Tú novia? — una voz la sacó de su análisis fotográfico, enseguida identificó a la responsable. Era la rubia a su lado. Antes de poder responder, la chica continuó. — Es linda, seguro eres la envidia de todos. — la sonrisa se la rubia, según Kendall, era lo más parecido a una sonrisa felina.

— No, no es mi novia. — se mordió la lengua de inmediato. — Nada de eso. — Kendall sonrió un poco y apagó el teléfono. Sabía que si quería completar su tarea tenía que salir un tanto de su zona de confort.

— Ah, ¿te gusta entonces? — Kendall se encontraba sin palabras, la rubia lo notó enseguida y comenzó a reírse de ella en su cara. — Parece que necesitas un poco de ayuda. — la mujer le extiende su mano. — Me llamo Cara. —

— Kendall. — ella responde correspondiendo el gesto. Las cejas gruesas y negras no encajaban con el cabello rubio, pero Kendall no podía negar que le daba estilo personal, y ni hablar de los ojos, Kendall asoció a la mujer con un león. Igual de feroz.

— No pareces del tipo que frecuente mucho estos lugares. —

— No, en realidad hace mucho no salía por simple gusto. —

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