Anti-Natural

¿Traición?

Llegamos tan pronto recibimos el llamado por radio.
Al entrar a la enfermería Esther nos recibía..

—Es Miguel, ya está fuera de peligro.— Esther con una sonrisa nos daba la noticia.—Pueden pasar a verlo si así lo desean.—

Emma sin pensarlo corrió a la habitación de Miguel.
Al entrar, Él estaba sentado en su cama. Al vernos entrar sonrió, era la primera vez que lo veía Sonreír.

—No vuelvas a darnos un susto asi— Emma con voz cortada.
—¿Cómo te sientes?.— Héctor mientras le tocaba el hombro.— Esther dice que ya estás fuera de peligro y pronto estarás en casa con nosotros.—

—Si, estoy bien. Es bueno verlos.— Miguel sonreia.

Sin darme la oportunidad de Hacerle alguna pregunta o darle ánimos.
Esther entro a la habitación.

—Lamento interrumpir, dejenlo descansar mañana le darán el alta no se preocupen.— Agrego Esther.— De momento vengan conmigo.

Emma y Héctor salían de la habitación.
Y yo detrás de ellos, pero antes de cerrar la puerta. Miguel me llamo.

—Alan, Protege a Emma y a Héctor.— Miguel susurrando me lanzo esa frase que retumbó en mi cabeza.

Pero antes de cuestionarlo, Héctor me llamó.
Salí y me dirigí con Emma y Él.
Nos reunimos con Esther la cual nos daba instrucciones.
Instrucciones a las cuales no preste atención.

Las palabras de Miguel hacían Eco.
¿Por qué me pidió eso? Pensaba y pensaba.

—¿Han entendido las órdenes?—Esther con tono firme.

—SI— Emma y Héctor.

—¿Alan, todo bien?, te noto algo preocupado.— Emma mientras me tomaba de los hombros.— No te preocupes, es solo reconocimiento de la zona no pasará nada.— Sonríe.

—Si entiendo, estoy listo.— Respondí a su sonrisa.
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Esa noche mientras ellos dormían me levanté y decidí ir con Miguel.
No tenía sentido porque había dicho eso.

Salí de la casa cuidando no ser visto por los guardias de la torre y del terreno.

Mire una pequeña cabaña a unos metros de la enfermería y decidí esconderme ahí mientras se presentaba otra oportunidad de avanzar.

Escuchaba pasos fuera de la cabaña, y una voz de mujer.
Era Esther.

—Enviaré al grupo de Héctor a una misión más, Deben ser precisos y no dejar rastro.— Esther mantenía una llamada por radio— No fallen como la última vez.

Se alejaba y colgaba el radio. Espere unos minutos y decidí salir.
Me escabulli a la enfermería y no había nadie en "Recepción".

Acelere el paso y entre a la habitación de Miguel.
Y ahí estaba él, tenía la sensación de que me estaba esperando.

—¿Por qué tardaste tanto?— Dijo mientras sonreía.—Ven no tenemos mucho tiempo.

—Miguel ¿Que sucede? ¿No consigo entender, porque dijiste eso?— Nervioso pregunté.

—Hay cosas que debo decirte, cosas que Emma y Héctor tampoco saben.— Con tono susurrado y tranquilo.—¿Cuando harán la misión de reconocimiento?.

—¿Cómo sabes de la misión? nadie ha dicho nada.— más asustado y confundido que nada.

Sonaban pasos en el pasillo, Miguel me ordeno esconderme bajo su cama.
Sonó la puerta y entraba Esther.

—Ellos parten al amanecer, Es una pena que no puedas acompañarlos.— Esther con tono bajo y comprensión.—Te dejo esto, para que le des un vistazo.

Miguel tomo el archivó y comenzó a leerlo.

Después de unos minutos de silencio.

—Todo está en orden es un buen plan— Contesto después de leer el archivo.

—Es bueno saber que sigo contando contigo. Descansa mañana te darán el alta médica.—Esther se iba mientras le dejaba el archivo.

Despues de un rato.

Miguel me hizo salir de nuevo.

—¿Que están tramando? ¿De qué plan hablan?.— con tono algo molesto—¿Que nos estás ocultando? Habla de una vez.

—No es lo que imaginas calma, toma y lee esto.— Me entregaba una carpeta que sacó de un cajón.

Me dispuse a abrirlo y conforme leía cada párrafo.
Mi cara paso de un seño enojado a una cara de espanto, mis ojos se abrieron de par en par y mi corazón latía con tanta fuerza que sentía que me saldría del pecho..
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