- Capitulo 56 -

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Jeff

— No hay latido, es un milagro que sobreviviera tanto — Habla quitándose los guantes y caminando hasta su escritorio. — Pediré que preparen el quirofano para un legrado y evitar infecciones y complicaciones; la perdida se produjo de manera espontanea así que no habrá problemas legales, por el estado del producto debe haber sucedido hace poco, pero no puedo estar seguro,. — Lo veo levantar el teléfono y me voy sobre el para levantarlo por el cuello.

— Vas a encontrar un latido, ahora. Haz la otra sonografia, haz las sonografias que te de la gana, pero vas a encontrar un maldito latido. — 

Escucho los sollozos de mi esposa mientras se levanta de la camilla y tiro del hombre que tengo entre los dedos hasta dejarlo enterrado en la silla que hay frente a la camilla.

— Jeff, no... — Me pide pero no pienso escucharla. 

— Acuéstate — suplico — acuéstate otra vez, va a encontrar un maldito latido. —

— Jeff. — 

Me rehúso a creer que mi hija este muerta, no pienso permitir que me la quitan antes de que nazca, la sentí antes de saber que estaba ahi, la sentí desde el primer momento y no esta muerta, mi hija sigue ahi, es una Rivera; es una Soler, no hay manera de que se rinda y yo no pienso rendirme con ella. — Acuesta Pelusa y tu busca el maldito latido. — Le grito al doctor. 

A ella no puedo gritarle, no ahora, nunca, me voy sobre ella para ayudarla a recostarse en la camilla y escucho la pistola de Ray mientras quita el seguro; esta colocando el silenciador con calma ante los ojos del doctor. 

— Encuentra un latido, fabrícalo si te da la gana. — Le habla pegando el cañón a su cabeza y veo como el doctor saca de las gavetas la maquina larga que cubre con un preservativo.

 — Abre las piernas mi amor. — Suplico pegando mi frente a la suya. 

— No quiero, no lo vale.—

— Por favor bebe...— Vuelvo a suplicar intentando contener mis propias lagrimas — solo una vez, solo una vez y escucharemos a nuestra bebe.—

— Jeff no hay latido, no, no...— Su llanto amenaza con hacerme llorar y rezo por un latido, por un sonido,por cualquier cosa.

— Por favor mi amor; hazlo por mi, por nuestro bebe.— 

Veo como acomoda las piernas en el sostén de la camilla mientras acaricio su frente antes de besarla. 

***

Aun no encuentran nada y empieza a quejarse; debe ser incomodo que te estén moviendo no se que mierda en el cuerpo. Ray continua apuntando a la cabeza del medico cuya palidez empieza a asquearme. 

 Me voy de rodillas al suelo, pierdo la fuerza en la piernas y en el resto del cuerpo cuando el sonido llena los pequeños altavoces que hay en la sala, suena como un murmullo... Es irregular y suena como golpes en el agua;pero es un latido, es un latido.

— Es débil — habla el imbécil. — Es irregular y realmente no confío en la supervivencia del producto; pero ahí esta. Ahora salgan de mi consultorio antes de que llamea la policía. —

Se levanta removiendo los guantes y encuentro las fuerzas no sé donde para levantarme y besar a mi esposa, mi amor, mi mujer. 

 — Imprime las fotos y escribe cualquier maldito documento que me diga como esta mi hija — digo desde mi posición — me dirás cada cosa que debo hacer para mantenerlas a salvo y recetas las vitaminas, los medicamentos, lo que te de la gana,rápido. —

Eros -BorradorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora