loml o.s

one shot

23 de junio 2024

Se terminó el otoño y por las calles se empezaba a asomar la nieve que caía sin aviso y por la que nadie se entusiasmaba. Los aeropuertos cerraban y la gente prefería quedarse en sus hogares disfrutando de la calidez artificial del calentador, la estufa o el radiador. Como sea que lo conozcan.

Para algunos era aburrido ver las calles teñidas de blanco pero el adormecedor  sentimiento de sentirse vivo por tener los dedos congelados era lo que me mantuvo de pie en la esquina de mi edificio, observando cómo la nieve seguía cayendo a mi alrededor. Parecía que el mundo se congelaba junto con mi corazón.

Lo cierto es que el chico que protagonizó mis fantasías durante tres largos años decidió arruinarlas por completo, dejándome en un mundo que creía conocer y del cual ahora quería desaparecer.

Me sentía humillado, avergonzado, usado. Todo lo que jamás creí sentir. Al menos no luego de jurarle a mis amigos que no lo dejaría volver a mi vida.

Se trataba de Taehyung, un chico que conozco desde los 18. Fue mi compañero en un curso de inglés operacional que hice hace tres años luego de terminar el secundario. En ese tiempo tonteamos un poco pero sin concretar nada debido a que nunca me detalló sus intenciones y yo ya me había convencido de que eran ideas mías.

Me mudé a otro estado días después de terminar el semestre junto a la noticia de que había una relación entre una chica y él, a la semana de terminar nuestro curso, de nuestro último encuentro y beso. No sabia qué pensar pero tampoco me mortifiqué con la esperanza de encontrar a alguien más.

Cosa que nunca sucedió.

Con cada beso, toque o caricia de un desconocido pensaba en él. No podía evitarlo, amaba tanto cada pequeña cosa que todavía lo recordaba todo muy bien. Cada gusto, gesto e incluso su mirada; que cambiaba dependiendo de lo que hablaba. Me encantaba mirar el brillo de sus ojos cada vez que me conversaba, aunque sea de un tema que no me interesaba.

Así pasaron los años hasta que hace unos meses atrás que me enteré del rompimiento con su pareja. Cumplían tres años cuando se separaron, el 6 de abril. El día de mi cumpleaños. (Es mi cumpleaños no el de Jimin ㅠㅠ) Si, su aniversario era el día de mi cumpleaños. Cada año al entrar en instagram encontraba las historias de ellos jurándose amor eterno mientras que a mi me quedaba conformarme con el recuerdo de que un día todo ese amor fue para mi. Aunque se haya esfumado al contar un par de días.

Mis amigos lo sabían, en cambio yo con una sonrisa desmentía mis sentimientos por él, jurando que había pasado la página y que estaba bien.

Lo cierto es que esta historia necesita más detalles para comprender porqué aunque mi corazón fue suyo durante estos largos años no pude estar feliz por completo cuando lo vi allí de pie meses después dándome la disculpa que yo creía merecer o por lo menos la que idealicé como la cura a esta infelicidad.

Durante tres años hubo cruces en fiestas, en el gimnasio e incluso en la calle. En todas me ignoraba por completo, incluso llegó a responder que no lo recordaba cuando le preguntaron si nos conocíamos. Comentario que me llegó por más de uno de mis amigos.

Si bien yo me había mudado un poco lejos siempre me hacia tiempo para visitar a mis padres, y con eso, para salir los fines de semana con mis amigos. En esas fiestas nos cruzábamos bastante, pero ambos nos ignorábamos. Por lo menos yo empecé a hacerlo luego de que él lo hiciera en repetidas ocasiones. Aunque era confuso ya que al pasar por mi lado dejaba caricias en mi cuerpo. Confundiéndome aún más. Si no era la cintura era mi muslo, incluso en las filas de las bebidas disimuladamente tomaba mi mano o la acariciaba.