big reputation, big reputation
oh, you and me we have big reputations.
🏎️🏆🖤🍷
dónde gaia y max se odian a muerte y casi nadie lo sabe.
o donde gaia y max tienen que dejar sus diferencias atrás para salvar las reputaciones del otro.
o donde gaia...
Es una noche del sábado y en la televisión están dando una repetición del GP de Baréin, Gaia mira con aburrimiento, mientras toma un sorbo de su cerveza, que está a punto de acabarse, todos se preparaban para la carrera del dia siguiente, y ella simplemente estaba sentada en el taburete, escuchando a hombres tratando de llevarla a la cama.
Miró a Max Verstappen subir al podio, en el primer lugar y de repente la cerveza tuvo un sabor amargo y desagradable, movió sus labios en una mueca de desagrado y tragó grueso.
-Es un completo idiota que gana todo- dijo en voz alta, aún con la mirada fija en el televisor- quizás deberían renunciar todos y simplemente darle los premios, es ridículo.
-Es un buen corredor, no digo que el mejor, pero si es bueno- comentó el chico de la barra- ¿otra cerveza?
Ella asintió.
-Pero déjala en la botella, no necesito un vaso- pidió- para mí hay mejores corredores, cada vez que gana verstappen muere un hada.
-Tienes razón- dijo una voz masculina a su lado- este año hay mejores corredores que ese rubio.
-Mi fantasía sexual es verlo fuera del podio- dijo la chica, un poco ebria, con cierta malicia- es excitante verlo perder, da hasta cierta pena.
Iban a responderle, cuando una voz en la mesa de atrás, la hizo darse vuelta, aún sentada en el taburete, un hombre de gorra y lentes de sol, tomaba un trago, no parecía nada muy elaborado y su vestimenta era demasiado casual para estar en Mónaco.
-Lástima que está más en el podio de primero, que fuera de él.
Gaia soltó una risita, tomando la botella de cerveza fría, dándole una sonrisa de agradecimiento al bartender.
-Habia tardado en aparecer un fan de verstupido- se burló- en algún momento habrá otro campeón, quiere hacer la de Schumacher y no le sale.
El desconocido apretó el vaso entre sus dedos, y ladeó la cabeza, escuchando el comentario, soltó un "já".
-Siempre los más obsesionados, son los que dicen ser "haters".
-No es tan importante para mí, como para denominarme su hater. Solo quiero ver a otro campeón mundial, gracias.
-No creo que lo veas, pero está bien- se encogió de hombros- no todos pueden tener razón en esta vida.
-Seguramente pierde el siguiente- dijo refiriéndose a la carrera del día siguiente, soltando un pequeño "hip" debido al alcohol en su sistema- quisiera ver tu reacción cuando veas que tengo razón.
-¿Tan segura estás?
-Apostaría cualquier cosa- aseguró- mis malas vibras siempre funcionan.
El extraño se levantó de la mesa, acercándose un poco a ella, que aún continuaba dándole la espalda y riéndose de cualquier estupidez, debido a la borrachera.
-Apostemos entonces- dijo seguro también- yo apuesto a que Verstappen gana mañana.
-Y yo apuesto que no- bufó- si gano que ¿me invitarás una cerveza mientras lloras porque tenía razón?
-Puede ser, pero no voy a perder
Gaia se dió la vuelta inmediatamente, sintiendo que los efectos de la borrachera bajaban, la molestia invadía su mente y apretaba la mandíbula de inmediato, el extraño se quitó los lentes de sol, dándole una sonrisa burlona a la chica, quién ahora podía mirar a los ojos.
-¿Y que harás si yo gano, Horner?- preguntó cruzándose de brazos, mientras las personas en el bar los miraban atentos e incluso algunos, sorprendidos, la chica ahora estaba callada y no emitía ninguna palabra, aunque sus ojos expresaban todo.
Ella retrocedió hasta chocar con la barra de tragos, el la miró, cuando estuvieron lo suficientemente cerca para hablar bajito.
-¿Me darás el beso que tanto quieres?
-Ni en tu mejores sueños, Verstappen- dijo ella, tomando sus cosas para irse, pero el la tomó del codo, haciéndola mirarlo enojada- jamás estaría con alguien como tú.
-¿Eso también lo quieres apostar?
. . .
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