Jin se encontraba acostado en el inmenso y placentero lecho, con su cuerpo laxo después de pasar una noche inolvidable, completamente satisfecho con la experiencia vivida. Abrió los ojos lentamente y las pupilas cerrándose ante la claridad de la habitación avistaron en primer plano al culo de Lee Namjoon entrando al baño, una sonrisa se apoderó de su rostro adormilado. En medio de un suspiro cerró los ojos y decidió revivir en pensamientos todo, una vez más.Cuando el avión privado de Lee aterrizó en la pista, las piernas empezaron a temblarle y el corazón a punto de vomitarlo, durante el viaje se había sentido como un Rey, los guardaespaldas le habían brindado todo tipo de atenciones, pero cuando se encaminó a la puerta de la nave vaciló al menos un par de minutos, mientras asimilaba que al bajar las escaleras una alfombra roja ¡una jodida alfombra roja! Lo esperaba, tuvo que respirar profundamente y parecer tranquilo cuando solo quería llorar de felicidad, armándose de seguridad para no rodar por las escaleras y hacer de cuenta que esas cosas no lo sorprendían, sino saltaría al ruedo lo pueblerino o el mesero de restaurante de camino.
Odiaba controlarse, pero con un hombre tan importante debía hacerlo, cada molécula de su cuerpo dieron volteretas cayeron desmayadas ante el asombro, cuando uno de los hombres más importantes del continente y el más influyente de Asia y America, se acercaba sonriente con un smoking y un inmenso ramo de rosas rojas.
Le había dicho que tenía trabajo pendiente y que por esa razón no podía buscarlo, pero que se encargaría de que su traslado fuese placentero, eso lo había cumplido, pero no pensó que lo estaría esperando a su llegada.
—Bienvenido, es mi manera de disculparme por no ir personalmente a buscarlo. —
—Gracias… No se hubiese molestado, comprendo que es un hombre muy ocupado. —Se felicitó mentalmente porque sólo titubeó un poco, mientras recibía el ramo, que debía tener una cincuenta rosas.
—Me imagino que ha sentido el cambio de clima, por favor vamos a un lugar más fresco. —.
Es el clima, pensé que era mi temperatura corporal y todo lo que este hombre me provoca. —Cavilo y le sonreío amablemente.
Entraron al vehículo y al salir del aeródromo la vista de Jin paseaba del hombre a su lado al paisaje que se presentaba, así como se percataba de las camionetas que lo seguían y las que iban adelante, ni el jefe de estado contaría con tanta seguridad.
—¿Es la primera vez que visita Japon? —preguntó
—Sí señor… Es tan alegre como me la imaginé.
—Namjoon, por favor llámeme Namjoon. —Le pidió amablemente.
—Está bien Namjoon, ¿Podrías llamarme Jin? —Le solicitó.
—Por supuesto Jin… —Tomándole la mano con galantería. —¿Cómo van tus cosas? —preguntó interesándose
—Bien, muy bien… Trabajo todos los días, voy al gimnasio… No tengo muchas cosas de las cuales hablar —dijo sonriendo nerviosamente.
—Creo que sí tienes, solo que no tienes confianza y lo entiendo, pero si quieres contarme de que trabajas, pequeñas cosas que nos ayuden a conocernos mejor… De mí tal vez sepas algunas cosas por los diarios, pero no todo el tiempo dicen la verdad.
—Trabajo en una boutique, es de mi mejor amigo mi hermano, de usted solo sé que tiene dos hijos y es viudo, también sé de su sobrino, el asistente fiscal, a él lo conozco personalmente.
—¿Te has metido en problemas? —preguntó sonriente—. Espero y mi Yoon no te haya hecho pasar un mal momento, tiene un carácter fuerte, pero…
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EPIFANIA 2 YOONMIN (Saga Selenosis Completa)
AcakEn un mundo donde los secretos son moneda corriente, los lazos de sangre pueden ser tanto una Bendición como una maldición. Yoongi con su egoísmo desmedido desencadenara una serie de eventos que cambiarán la vida de aquellos que lo rodean. Jimin bri...