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Era como ver otra versión suya frente al espejo, una mujer y un hombre la habían sacado de la habitación y dirigido hacia otro lugar mismo que parecía ser el guardarropa de Min YoonGi.

La hicieron bañarse y al salir distintos vestidos y maquillaje estaba esparcido por el lugar.

Ahora después de horas ahí estaba ella con un vestido lila con escote V y delgados tirantes sosteniendo la tela, su cabello ahora rizado caía brillosamente sobre su espalda, sus ojos tenían un tono suave de café con leves motas de morado y un brillos esparcido solo en la parte interna del ojo, por otra parte sus mejillas tenía un color rosado mezclado con un tono naranja haciendo combinar cada color y sus labios que antes se encontraban deshidratados y sin vida, ahora lucian un hermoso color rosado con un gloss que los hacía lucir más grandes.

Sin duda las manos maestras de aquel hombre habían hecho que cada color por muy diferente que parezcan combinarán a la perfección.

—Es un trabajo perfecto...resaltaras incluso si no tuvieras maquillaje... realmente...eres perfecta.

Ella los observo a través del espejo sin poder hablar solo sonriendo les grandemente.

—Es hora de que bajes... él señor espera por usted.

Asintió encaminando se pero siendo detenida al instante —Sus tacones.

Un par de zapatos brillantes le fueron entregados, la mujer que estaba ahí y quién fue la encargada de peinar su cabello se agachó para ayudarla, colocó delicadamente cada pieza mirando la con fascinación.

En ese momento ella le agradeció con un asentimiento y una sonrisa enorme y salió en busca de quién por esa noche sería su esposo amado.

Bajo lentamente las escaleras sintiendo su corazón alborotarse por lo nerviosa que estaba.

Al llegar a la primera planta lo vió ahí ,el vestía un traje negro de camisa blanca y una corbata a juego con su vestido.

No entendía como era posible que todo lo que se pusiera le quedará bien y menos como solo un simple traje podía hacerlo más atractivo.

—....E-estas...¿Nos vamos?

Quiso escuchar ese cumplido,lo anheló aún que no entendiera por qué, era estúpidamente incorrecto sentirse asi cuando solo han pasado semanas de haberse conocido.

Pero al final era inevitable, Min YoonGi era un hombre atractivo y siempre era respetuoso, le daba su espacio y cuidaba de ella tanto de cerca como de lejos, él a pesar de no permitir le irse siempre le decía un resumen de lo que sucedía en el exterior y lo más importante, siempre estaba pendiente de su familia, cada movimiento, cada problema se lo decía. No entendía al hombre pero estaba dispuesta a decifrar cada capa de él incluso si eso significaba quedarse a su lado pues no tenía a su presencia, extrañamente nunca lo hizo.

Sold Donde viven las historias. Descúbrelo ahora