Desición

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Lo que nadie vio es acierto pelinegro que escucho todo, este había regresado por la manta de su hija, y se quedo de piedra cuando escucho el grito de Thor, y presencio todo, dejándolo congelado en su lugar

En la cena de ese día, Loki parecía distante, Thor temia que estuviera pensando en irse, cuando acabo la cena Thor fue a los aposentos de Loki

-Thor- dije sorprendido al verlo

-puedo pasar- pidió timidamente

-pasa-

Thor vio a Helle jugando con la figuras de madera que le hizo, al verlo pidió ser cargada

-tho- dijo la pequeña

Para Thor eso fue el peor golpe que le pudieran dar, con una expresión doliada cargo a la pequeña

-a que has venido- dije

Me di cuenta del dolor de Thor, sabia que ser llamado por su nombre por su princesa fue un golpe duro para el

-de verdad piensas irte- dijo con dolor

-yo-

-por favor quedate- rogo -hare lo que tu quieras-

-Thor- dije sorprendido

-bien si no quieres quedarte, puedo acompañarlos- pidió -se que en realidad no me necesitas-

Y era cierto, desde los tres años de Helle, ella puede extraer la magia del ambiente, ya no necesita de mi o de Thor

-por favor- pidió

-no creo que sea correcto-

-pero-

-es tarde- dije mirando a otro lado

-lo siento- se disculpo

-me voy- dijo con renuencia

Lo vi hablando con Helle, esta reía y poco a poco quedo dormida, Thor la arropo, le dio un beso en la frente y se alejo de la cama

-descansa- me dijo sin verme a los ojos

-descansa- repeti

El salio y cuando cerre la puerta no sabia que pensar

Al día siguiente me reuní con madre, pero también mande a traer a Tony, Nat, Wanda y Wong

-bien esto es nuevo- dijo Tony

-que pasa- dijo seria Nat

-Loki- me saludaron Wanda y Wong

-cariño- dijo madre

-tengo algo que decirle- dije nervioso

-cuenta- dijo serio Tony

Les conte lo que paso el día anterior, desde la llega de Sif hasta la despedida de Thor en la noche, no solo les conte sino que los hice ver mi recuerdo

-no me lo creo- dijo Tony molesto

-no le veo lo malo- dijo Wanda

-eso no, ahora le debo dinero a Nat-

-que- dije mirandola

-una apuesta- explico ella

-no quiero escucharla- dije

-cariño, tu que sientes- dijo madre

-que estoy traicionando a Stephen- dije decaido

-no lo haces- dijo Wong

-pero-

-aceptalo, el ya no esta, y tu mereces ser feliz- dijo Wong con una sonrisa

-tiene razon, además que no lo dejaras de amar- dijo Wanda -una parte de el siempre esatra contigo y lo sabes-

el dolor del Dios del engañoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora