Taehyun estaba obsesionado.
Se había obligado a mantenerse alejado de beomgyu por una noche.
Quería darle al chico algo de tiempo para pensar, tiempo para procesar todo lo que había descubierto. El tiempo suficiente para procesar a taehyun, verdaderamente. Era una tortura, pero sabía que era lo correcto para el chico.
El demonio de taehyun se había enfurecido por la distancia, insistiendo en que estuvieran cerca de su compañero. Una probada de beomgyu, y su obsesión solo había crecido.
Se habían comprometido en acechar al chico.
Había vigilado la casa de beomgyu la noche anterior y había visto a otra enfermera del hospital llegar con lo que parecían bolsas de comida chatarra.
Una mujer, afortunadamente, taehyun no estaba seguro de que su demonio se hubiera quedado al margen mientras otro hombre se quedaba a solas con su compañero. Especialmente considerando que la otra enfermera no se había ido hasta la mañana siguiente.
Pero le había recordado al demonio, y a sí mismo, que era bueno que beomgyu tuviera amigos y apoyo. No iban a ser unos brutos celosos a los que les molestaba que su compañero tuviera lazos estrechos más allá de ellos mismos.
Y beomgyu era su compañero.
Ahora estaba seguro de ello, luego de lo acontecido la mañana anterior.
Después de tocar al chico, escuchar sus gemidos, saborear su liberación,
taehyun nunca había experimentado algo así en sus dos siglos de vida. Su polla se endureció al recordar la mirada en el rostro de beomgyu en el momento en que se corrió con sus mejillas sonrojadas de placer.
Y también estaba el momento justo antes de que beomgyu se volviera a dormir, cuando vio al demonio en los ojos de taehyun y no solo lo toleró, sino que lo tocó. Lo saludó con ojos cálidos y saciados y una dulce sonrisa.
En ese momento, taehyun había sentido algo en su liberación demoníaca, una tensión que había estado presente desde el momento en que se había convertido y que de repente desapareció.
Había estado planeando mostrarse de nuevo esta noche (parecía ser que su límite estaba en una sola noche lejos de é). Pero luego se sorprendió al ver a beomgyu salir de la casa, luciendo más que delicioso en unos jeans negros ajustados y una sudadera con capucha azul bebé debajo de un abrigo largo y oscuro. taehyun había tenido la tentación de interceptarlo en la entrada, empujarlo contra la pared y aprovecharse malvadamente de él.
Pero, probablemente eso no entraba dentro de la idea de "darle espacio", por lo que, en cambio, había seguido discretamente a beomgyu mientras se dirigía a un bar en la ciudad.
Taehyun no había pensado que su compañero fuera del tipo que salía mucho, tenía esa mirada de agotamiento en sí mismo que provenía del exceso de trabajo, no de las fiestas excesivas, pero, de nuevo, en realidad no sabía muchas cosas acerca del chico sobre el que él y su demonio estaban tan obsesionados.
Ese pensamiento erizó los vellos de su demonio inmediatamente. Sabemos lo suficiente. Sabemos que es dulce, suave, nuestro, nuestro, nuestro.
Sacudió a su demonio. Sí, lo entiendo, estás enganchado. Ahora silencio.
El demonio se quejó un poco más de él, pero finalmente retrocedió. Parecía confiar ahora en que taehyun no iba a salir corriendo y dejar atrás a beomgyu. Confiaba en que él estaba tan adicto al chico el mismo demonio.
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Vampire's mate [taegyu]
Fanfiction𝙨𝙞𝙥𝙣𝙤𝙨𝙞𝙨 𝘣𝘦𝘰𝘮𝘨𝘺𝘶 𝘤𝘩𝘰𝘪 está acostumbrado a valerse por sí mismo, trabajando sin parar como enfermero de urgencias para pagar los cuidados de su madre. Ha dejado su propia vida en pausa desde siempre. Sin embargo, todo cambia cuando...