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Al fin era jueves, pasé estos días evitando a todas las personas que podía, no me encontré con Matheo ni sus amigos, tal vez o porque cada vez que los veía a los lejos, daba media vuelta y me iba a otro lado.

Extraño a Corban, quisiera verlo.

Abrí las pesadas puertas de madera de la biblioteca, era el único lugar en donde si había completo silencio, lo que últimamente hace falta en mi cabeza.

Estaba buscando uno de los libros de pociones para hacer mi tarea, no quiero tener mas problemas con Snape, pero una conversación al otro lado de la estantería hizo que me detuviera.

-Es que no lo entiendo -dijo una chica con voz chillona.

Hice una mueca al darme cuenta que era la misma chica, como es que se llamaba? Cho? algo así me dijo Zabini.

-Todos saben como es Matheo, no entiendo porque te sorprende

-Yo se que me lo va a pedir

-Yo lo veo bastante interesado con la zorra nueva -apreté la mandíbula, cuando la escuche- deberías dejar de hacerte ilusiones.

-Esa zorra no se interpondrá en mi camino -respondió Cho con molestía- el es mío.

Iba a salir a dejarle un par de cosas claras, cuando una chica que ya conocía apareció detrás de Cho, sacándole un susto.

-Mierda, Astoria -dijo poniendo una mano en su pecho- no puedes aparecer así.

-Y tú no deberías hablar de esa forma .le dijo molesta- a la próxima que escuche que insultas a la nueva, me encargare que Matheo no se te vuelva a acercar.

-Ni siquiera es tu amiga, para que la defiendes.

-Es mi puto problema, ahora largo.

Cho después de mirarla mal, se alejó con su grupo de amigas.

-Te quedarás ahí atrás para siempre? -dijo volteando a la estantería donde me estaba ocultando.

Salí por el lado derecho para encontrarme con Astoria sonriendo.

-Lamento que hayas escuchado eso, Cho es una tarada.

Me quedé en silencio, analizando todo de esa chica. Era muy guapa, y al parecer amable.

-Gracias pero puedo defenderme sola.

Pensé que me mandaría a la mierda pero en cambio soltó una pequeña risa y fruncí el ceño, que era lo gracioso?.

-Vaya -dijo tapando su boca sonriente- Matheo tenía razón.

-Disculpa?

-No lo tomes a mal, el dijo que eras -se quedó en silencio, sonriendo- un poco seria

-Sería?, eso dijo? -entrecerré los ojos.

-Antipática, para ser precisos -dijo sonriendo- Mucho gusto, soy Astoria, ya me presente pero tu todavía no -me ofreció la mano.

No me moví por un segundo, no quería hacerlo de hecho, pero hace meses siento que mi cuerpo no es mío, así que este se movió sin hacer caso a mis advertencias.

Estreche su mano -T/N... Ross- dije.

-Bueno T/N Ross, puedo sentarme contigo? -me mostró unos libros de pociones que tenía en su otro brazo- Al parecer también los necesitas

Sin esperar mi respuesta se sentó en la mesa vacía a un lado de nosotras con una sonrisa.

Acaso todos en este colegio te preguntan algo y luego lo hacen sin que les respondas?. Pero sin embargo, me senté con ella por el resto de la tarde.

TODO LO QUE FUÍ (Matheo Riddle)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora