--Taerae--
Taerae llegó a su casa, y al cerrar la puerta detrás de él, fué recibido cálidamente por su madre.
Mamá de Taerae: Hola, Taerae, bienvenido (Dijo sonriendo y recibiendo a Taerae con un abrazo) ¿Cómo te fue hoy?
Taerae: Hola, mamá, bien, estoy algo cansado (Respondió sonriendo levemente)
Mamá de Taerae: Si, te entiendo, ¿quieres que te prepare algo para comer o quieres irte a dormir ahora?
Taerae: Te ayudo a preparar algo, ya luego iré a dormir un poco.
Mamá de Taerae: Bien (Sonrió y ambos ingresaron a la cocina)
Luego de preparar el almuerzo y comer, compartir unas charlas juntos y ordenar un poco, Taerae se despidió momentáneamente de su madre y se dirigió a su habitación, se quitó la sudadera y se recostó en su cama mirando el techo.
Taerae: (suspiro) Ay, estoy cansado...
Una pequeña brisa de viento se filtró por la ventana junto a su cama, Taerae al sentir la caricia del aire en su rostro, volteó su cabeza suavemente hacía la ventana a su lado, viendo la pequeña apertura que permitía entrar el fresco a la habitación. Y en ese instante recordó.
Taerae: (fruncío levemente el ceño y dijo para sí mismo en un susurro apenas audible) ¿Quién era ese chico? No creo haberlo visto antes, pero...
Se sentó en su cama, y miró el suelo por un momento, antes de ponerse de pie y acercarse a la ventana para cerrarla totalmente evitando que siga ingresando cualquier corriente de aire a la habitación.
Taerae: No creo tener que darle importancia a ello (Trabó la ventana y volvió a su cama tapándose con las sabanas y poniéndose cómodo en la misma)
Cerró sus ojos buscando la tranquilidad y dando un último suspiro antes de quedarse dormido, pasado un rato largo se despertó al escuchar su teléfono sonar, era del chat de Lew, quién le estaba enviando los trabajos que tenían para la semana próxima, le agradeció, y luego de estirarse en la cama se puso de pié, saliendo de su habitación.
Mamá de Taerae: Hola, hijo, ¿Descansaste? (Dijo dejando la revista sobre la mesa)
Taerae: Si, gracias, mamá (Se acercó al refrigerador y sacó la botella de agua, para luego buscar un vaso) Ahora iré a comprarme unas cosas, ¿Necesitas algo? (Volteando a verla)
Mamá de Taerae: No, estoy bien, ve tranquilo.
Taerae: (Asintiendo) Está bien, ya regreso (Sonrió despidiendose de su madre mientras se dirige a la puerta)
Taerae tomó su abrigo y billetera antes de salir de la casa, al salir sintió el fresco de la tarde, y mientras caminaba por las caminaba por las calles, se detuvo antes de cruzar y sacó sus auriculares conectandolos a su teléfono para escuchar musica, siguiendo su camino.
Antes de ingresar a la tienda, se quitó los auriculares y empezó a escojer entre los estantes del local, eligiendo algunos snacks y bebidas para él, y para llevar a casa de Hwarang luego. Se dirigió al mostrador y pagó todo, guardado en una bolsa, y volvió a ponerse sus auriculares para salir de la tienda volviendo a guardar su billetera.
Aunque estaba con los auriculares pudo diferenciar una voz no tan lejos, pero fue que volteo cuando sintió una mano tocar su hombro, Taerae se detuvo y volteó quitándose los auriculares, encontrando la mirada de aquella persona parada detras de él. Era ese chico, el mismo que había visto en la cafetería, con la misma expresión seria pero amigable en el rostro. Taerae lo miró por un momento y bajó la mirada a su mano extendida.