Single Alfa | Minayeon

Capítulo V: Percance

Mina tecleaba concentrada en su computadora con sus lentes puestos, revisaba algunas cuentas con los bancos con los que tenía convenios la empresa restando las ganancias de las deudas. Un trabajo tedioso que la tenía con el ceño fruncido, al menos estaba tranquila de que Jiwoo estaba en su colegio estudiando y que había llegado a tiempo esa mañana, tenía que decírselo a Chanyeol en la hora de la almuerzo. Una hora que estaba cerca, en su reloj le indicaba que pronto sería medio día y ella podría tomar su deseada hora de comida, sin embargo, su teléfono sonando la hizo dejar de teclear y tomar la llamada.

—¿Sí?

—¿Hablo con la señora Myoui Mina?—Una voz masculina se hizo presente en la llamada, Mina se quitó las gafas masajeando sus ojos.

—Sí, con ella. ¿Quién es?—Cuestionó.

—Soy el maestro Byun Baekhyun, hablo de la escuela de infantes Roshyta. Soy director de grupo de Jiwoo—Le dijo a lo que Mina se levantó de golpe—. Le hablo porque han pasando treinta minutos desde que las clases terminaron y no han pasado a recogerla. ¿Podría venir por ella?

Mina se dio una palmada en la frente, había olvidado el pequeño detalle de que Yeji le había dicho que entraba a estudiar justo esa semana y por ende tendría que haberle conseguido reemplazo, algo que claramente no pasó. Se sintió terriblemente culpable por su pequeña por lo que comenzó a caminar hacia la puerta tomando su saco del perchero.

—Iré lo antes posible, ¿cómo está ella? ¿Está llorando?—Cuestionó con preocupación saliendo de la oficina, dirigiéndose a la de Chanyeol.

—Ella está bien, la tengo conmigo en el salón de profesores pintando algunos dibujos. Espera verla pronto—Contestó el hombre.

—Debo colgar, maestro Byun. Prometo llegar en menos de 20 minutos—Con esto colgó la llamada entrando a la oficina del peli negro sin avisar.

El alfa revisaba algunas carpetas en su escritorio cuando levantó la mirada para verla con el ceño fruncido.

—Park, debo irme a recoger a Jiwoo. Salió y nadie la recogió porque la niñera que tenía volvió a estudiar, se me pasó completamente...—Habló atropelladamente la menor con ganas de llorar.

—Cálmate, Mina—Se acercó suavizando su mirada y suspiró—. Te acompañaré.

—No hace falta, iré lo antes posible y conseguiré quien la cuide...

—Insisto en que quiero acompañarte, podemos almorzar en el camino y poner una excusa si alguien pregunta—Le contestó haciendo que Mina no tuviera más opción que aceptar.

Llegaron en diez minutos a la escuela, Mina se bajó con rapidez de su auto escuchando las quejas del mayor por su conducción sacada de una película de acción aunque ella no le prestó atención cuando corrió hacia la entrada del lugar. Buscó el salón de los profesores donde vió a la pequeña Jiwoo pintando al frente de un omega molesto e irritado.

—Mi amor...—Murmuró Mina abrazando a su pequeña quien hizo lo mismo feliz de verla—. Lo siento...

Un carraspeo hizo que voltease a ver al maestro, pocas veces se habían visto por lo que no pudo decir que estuviera encantado de verla en esa situación.

—Señora Myoui, ¿a qué se debe que hayan dejado a su hija en la escuela por tanto tiempo después de la salida? Es una negligencia, primero porque es una menor de edad y segundo por ser una omega—Le recriminó con molestia.

Mina hizo una reverencia y suspiró.

—Lo siento, maestro Byun. Tuvimos un percance con la niñera, pero le juro que no va a volver a pasar—Dijo volviendo su mirada a Jiwoo—. Cariño, agradece al maestro Byun por su amabilidad.