🌜DOS🌛

35 5 5
                                    

AGOSTO

—¡Yo sé donde esta!—. grita Laura moviendo sus manos para que la veamos.

Cada inicio de semestre es el mismo proceso: encontrar el salón en una escuela con tres edificios de tres pisos. Siempre la que encuentra el salón es la jefa de grupo, pero está vez, es Laura quien nos guía hacia el nuevo salón.

Según tengo entendido por una publicación que hizo en el grupo del salón en Facebook, es un salón que se encuentra entre dirección y coordinación. Y las malas lenguas, solo introducen a ese salón los grupos que han obtenido un mal rendimiento académico en los periodos escolares anteriores.

Horas después y justo antes de salir a receso llega el Coordinador con el Psicólogo y uno de los prefectos.

—Buenos Días Muchachos—. Saludo el coordinador, quién es un hombre canoso, de unos 50 en adelante pero es una persona agradable a comparación del psicólogo o el prefecto quienes están parados como tablas a modo escuela militar. Unos se paran pero una sonrisa del Coordinador es suficiente para que no lo hagamos.

—Quédense en sus asientos. La razón de nuestra llegada, en primero, darles la bienvenida a quinto semestre, y la otra es el porqué están en este salón; la mayoría ya sabe que en semestres anteriores han tenido muy malas calificaciones, además de llamados de atención. Sabemos que los nuevos no tienen conocimiento de esto...-

Sigue hablando, pero de vez en cuando miro en dirección de Laura. Es hermosa cuando tiene su cabello en una coleta o lo tiene lacio, pero encuentro más bonito cuando su melena se revelaba, algo así como un león. Sus mejillas son mas rosadas, tal vez por el calor del verano y el que estemos encerrados en un salón con techo de lamina. Pero le queda bien, pues le da un aire de niña, de dulzura. Algo que sigue atrayéndome de ella.

Voltee e intente decirme que solo éramos amigos, aunque sabía que debí de hablar con ella en vacaciones y no solo en los exámenes ordinarios.

Mike me había dicho antes de salir de vacaciones que le gustaba, pero que ahora solo lo negaba, algo momentáneo.

Creo que no debí enamorarme de mi amiga.

Creo que no debí enamorarme de mi amiga

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La cafetería está a punto de explotar. Nos habían juntado con los de primero en receso. Tanto que preferí no comprar nada y saludar a Grettel; otra chica que me atrae pero, solo eso. Nos saludamos, esta con sus amigas pero nos alejamos para hablar. Ella es más pequeña, su cabello es totalmente lacio que no lo peina. Miro sus pecas y me sonrie.

—¿Y qué tal el primer día Azael? — dice mientras juega con su cabello.

—Emm, aburrido de hecho, lo normal yo señalaría... ¿y tú? —

—¿Yo? Pues igual. Eso de iniciar clases me aburre realmente, pero el verte me da ánimos.—

—Oh, gracias por el crédito. Si, por eso no me gustan los primeros días, no hay que hacer trabajos por el momento, bueno, no sé si te va a impartir clases el señor Ricardo pero... ya nos puso a investigar—.

La otra cara de LauraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora