Dulces Mentiras, Amargas Verdades ❧ Englot G!P

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 26

Charlotte se encontraba, aparentemente serena en uno de los sofás de la sala del departamento que compartía con su primo. Frente a ella estaban sentados su tío, Ian y Thor.

El ceño fruncido enmarcaba la mirada acusadora muy propia de la fiscal, la que hacía más intensas las betas amarillas en sus ojos.

—¿Es una emboscada? —preguntó cruzándose de brazos con esa actitud cerrándose a cualquier negociación por parte de su tío. No iba a aceptar la relación de Thor con Megan. Ya lo había decidido y nadie la haría cambiar de parecer.

—No es una emboscada Char, solo es una reunión familiar —informó Reinhard, conociendo el temperamento obtuso de su sobrina y que definitivamente no lo había heredado de los Austin.

—¿Y los canapés? —preguntó sin poder controlar la insolencia en su voz—. Supongo que tiene algo de especial esta reunión.

—Nuestras reuniones siempre son especiales —aclaró Reinhard tratando de llevar de manera pacífica el encuentro.

—¿Nos piensa informar que está saliendo con la señorita Cuberth? —inquirió elevando ambas cejas y acorralando a su tío.

—Puedes dejar de lado el puto interrogatorio que aquí nadie está jugando al fiscal. —intervino Ian imponiendo su carácter como siempre. Evitándole que irrespetara a su padre.

—Char, con quién yo salga no es tema de conversación que voy a tratar con ustedes. Eso lo habíamos dejado claro —sentenció el hombre con voz firme ante la molestia que le causaba que alguno de sus hijos le reprochara sus aventuras con las féminas.

—Pero resulta tío, que con quién sale es la amiga de mi mujer —contestó evadiendo la intervención de su primo.

—¿Y qué con eso? —Una vez más Ian irrumpía porque le molestaba la actitud desconsiderada de Charlotte.

—Es que quiere controlarle la vida a todo el mundo —dio su opinión Thor, que hasta el momento se había mantenido en silencio.

—Entonces todos contra la insensata de Charlotte. Si de esto trata la reunión familiar —Descruzó sus brazos e hizo comillas con sus dedos en la palabra familiar—. Entonces yo paso —Evidenció la clara intención de largarse del lugar.

—No te atrevas a ponerte en pie Charlotte Austin —advirtió Reinhard con todo el mando que tenía sobre la chica—. Ya no son unos niños, yo no tengo por qué estar en esta situación.

—No es necesario que lo esté —intervino Charlotte, quitándole la palabra al mayor de los Austin.

—Pero me obligan a hacerlo, porque no me iré sin antes estar completamente seguro de que mis hijos se tratan como los hermanos que son y dejan de lado las rencillas sin sentido.

—Por mi parte no tengo nada en contra, pero no voy a aceptar las condiciones de Charlotte. —Thor habló y buscó la mirada de su prima—. No voy a renunciar a la relación que tengo con Megan y eso ya lo hablamos.

—Char, prima —tomó la palabra Ian tratando de robarse la atención de Charlotte, quien había puesto su mirada brillante por la molestia en Thor—. Creo en tus razones acerca de la relación entre Megan y Thor, pero la niña demostró abiertamente que se siente bien con él.

—La niña, lo has dicho Ian. Megan aún es una niña —recalcó Charlotte sus palabras.

—Fue una manera de decir, porque Megan tiene las cosas más claras que cualquiera de nosotros. La verdad creo que ese temor tuyo en cuanto a ella es algo exagerado —confesó abiertamente.

—No es exagerado y no voy a discutir contigo mis razones. No me harán cambiar de parecer y punto —delimitó y sus ojos dorados mostraban la veracidad de sus palabras.