Cap 1: volver a casa

315 14 0
                                    

Capitulo 1: Volver a casa

Un mes parecía ser poco tiempo. Un mes, después que de sus propias manos le habían arrebatado lo único que había amado de verdad en su vida. Un mes, donde no se había atrevido a volver a pisar esas tierras por miedo a los recuerdos. Pero ya no podía huir más, desde que había vuelto a Valaquia sabía que en algún momento debía volver a abrir esa herida, después de todo, antes de conocer a SungMin, su único propósito en la vida era encontrar a su padre. 

Su hogar, el lugar donde había nacido y se había criado, permanecía ante sus ojos igual que el día en el cual lo había dejado. Aunque todo era una simple ilusión. Aquel sitio, ya estaba cerrado. Ya nadie vivía allí; ya no había música afuera ni luces y gente riendo y chocando sus copas llenas de champagne. Todo lo que había era un candado oxidado resguardando las rejas de la entrada y una casa abandonada en las lejanías de la ciudad de Craiova. Y aunque KyuHyun no tuviese los mejores recuerdos de aquel lugar, una sensación de nostalgia lo invadió mientras apretaba aquellos fierros de la reja de más de dos metros de alto mientras su cuerpo era envuelto por una lluvia insaciable. 

― Eh vuelto… − murmuro el peli azabache cerrando los ojos y sintiendo como el agua caía por su rostro 

KiBum, su fiel sirviente desde pequeño, permanecía a su lado en silencio, esperando a que su amo le diera las órdenes a seguir. Sabía que no habían ido allí sólo para admirar el castillo por fuera. 

― ¿Deberíamos entrar? – inquirió KyuHyun ladeando el rostro hacia su derecha, aún no mirando el rostro de su sirviente. KiBum pudo apreciar esa sonrisa socarrona en los labios de su amo y asintió. 

― Como usted ordene – KiBum, con su apariencia de adolescente, hizo una reverencia denotando su respeto hacia el peli azabache para luego caminar lo poco que le distanciaba de las rejas. Miro el candado viejo que seguía haciendo de escudo y tomando el candado entre ambas manos lo apretó fuertemente. El candado se movió hacia los lados ante la extraña fuerza ejercida sobre él y en unos segundos se volvió polvo en las manos de KiBum. 

Las rejas se abrieron de inmediato hacia dentro, dándoles la bienvenida a los intrusos. KyuHyun se sintió como si realmente volviera a casa, claro que dada la ocasión, nadie le esperaba. 

― Entraras conmigo, nunca se sabe qué visitas podemos recibir – dijo KyuHyun pasando por el lado de su fiel sirviente 

KyuHyun sabía que no era muy bueno entrar de nuevo al castillo que le sirvió de hogar en su niñez. A pesar de que nadie viviese allí, sabía que muchas personas no le tenían precisamente aprecio; era el hombre más respetado, pero a la vez el más odiado por todos los vampiros y por algunas otras especies, tanto de su misma clase como de la clase baja. Más que nada era su carácter lo que lo había llevado a eso e incluso mucho más, era el precio por su cabeza. Nadie perdía la esperanza de algún día pillar a Cho KyuHyun con la guardia baja y atraparlo, ganándote muchos millones y el placer de haberlo atrapado o matado. 

Ambos hombres se adentraron en las tierras pertenecientes al castillo, único en la ciudad de Craiova, pues ninguna familia era tan poderosa como lo era la familia Cho, que pertenecía al linaje de los sangre pura. A los lados del camino por donde caminaban los dos chicos, se encontraba un hermoso paisaje de un hermoso y creciente pasto verde que llegaba mucho más allá de los talones y arboles de copa de grandes tamaños.

Al llegar a donde se encontraba la pileta con un ángel de ojos vendados y del cual ya no salía agua, tuvieron que desviarse un poco, pues la pileta se encontraba en medio del camino, lo cual ensanchaba un poco el camino en un circulo para luego volver a su figura central en un camino recto hasta llegar a la entrada principal. Subieron las escaleras, las cuales no eran muchas, hasta llegar arriba donde se encontraba la imponente puerta de madera. 

La seccion H IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora