Sevilla: Junio, 2016
MARA
Terminé de atarme la bota izquierda y me puse en fila junto a mis compañeros de equipo para salir al campo y jugar el último partido de la liga en esta temporada, hoy jugábamos contra el Coria C.F., si ganábamos acabaríamos segundos esta temporada.
Necesitamos ganar.
El partido puede que vaya a ser un poco más difícil ya que el Coria necesita al menos un empate para no descender por lo que no nos dejarían ganar fácilmente. Al salir al terreno de juego nuestro entrenador nos juntó a todos en un corro para escucharle.
— Chicos, hoy quiero que disfrutéis este partido, no penséis en ganarlo, tan solo disfrutad. Hemos hecho una temporada increíble y estoy muy orgulloso de todos y cada uno de vosotros. — dijo Fabio, mi entrenador — Así que jugar como lo hacéis siempre, pero esta vez sin pensar en el marcador. — nos animó.
Nos colocamos otra vez en fila saludando a los jugadores del otro equipo, más de uno puso una mueca al verme, eso al principio me afectaba pero con el paso de los partidos me empezó a dar absolutamente igual, total estaba haciendo lo que más me gustaba. ¿Qué más me daba la opinión de los demás?
Me fui a mi posición: centrocampista y me preparé para comenzar el partido.
Vamos allá.
NARRADOR OMNISCIENTE
El partido entre las categorías benjamines del Coria C.F. y el U.D. Tomares — equipo de Mara — comenzó. Ambos equipos estaban haciendo todo lo posible por meter un gol en la portería contraria lo que resultó difícil hasta que Hugo, un compañero defensa de Mara, cambió el rumbo del balón hasta llegar a los pies de la castaña, la cual corrió hasta la portería contraria esquivando con facilidad a los jugadores del equipo contrario.
Juan e Isa, los padres de la niña, la animaban — o más bien gritaban — desde la grada mostrándole a su hija su apoyo mientras que Alberto, su hermano mayor, grababa las jugadas que hacía su hermana pequeña. Fue en ese momento cuando un hombre vestido con un chándal con el escudo del F.C. Barcelona se sentó al lado del adolescente, el cual lo miró de reojo con curiosidad para luego seguir grabando a su hermana.
Mara siguió regateando a los defensas e hizo un pase bastante limpio para su edad hacia un compañero de su equipo, el cual se lo volvió a pasar al estar rodeado de jugadores del Coria, la castaña pensó durante unos segundos qué hacer hasta que decidió chutar a la portería. El esférico hizo un movimiento parabólico entrando a la portería por la escuadra, marcando gol.
Los tres se levantaron eufóricos a celebrar el gol de la pequeña mientras que esta corría hasta la esquina celebrándolo también junto a sus compañeros de equipo saltando felices.
El hombre desconocido se acercó a Alberto para luego hablar, llamando la atención de la familia.
— Perdón, pero ¿has grabado el gol y la jugada? — el castaño asintió — ¿puedo verla? — volvió a asentir extendiéndole la cámara al hombre.
Él la revisó con cautela para luego mostrar una sonrisa.
— ¿Es vuestra hija? — preguntó mirando hacia Juan e Isa, los cuales asintieron — Encantado, Jordi García, soy entrenador de categorías inferiores del barça. — les extendió la mano — Hace unos meses un amigo mío vino a un partido y me habló de ella, me dijo que le recordaba un poco a un estilo de juego similar al de Iniesta solo que más torpe y con mucha menos experiencia y tenía que venir para verlo con mis propios ojos. Sin duda no se equivocaba...
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A BASE DE GOLES || HÉCTOR FORT
FanfictionHéctor llegó a La Masía con siete años, dos años después llegó Mara, siendo de las pocas chicas de las instalaciones y convirtiéndose en una joven promesa del fútbol femenino. Ambos saben de la existencia del otro desde pequeños, sin embargo; estar...