Max - todo comenzó cuando llegue a otra ciudad, estaba algo feliz, pero a la vez triste ya que deje a mis amigos y algunos familiares en la anterior ciudad, al pasar las horas llegamos a aquella ciudad, en ese momento me brillaron los ojos por lo hermosa que era, estaba un poco aburrido, además de que ese día estaba muy caluroso, después de unos minutos llegamos al apartamento que alquilaron mis padres, era muy bonito, mis padres dijeron que el camión de la mudanza llegaría al día siguiente así que dormiríamos en el suelo con un par de sábanas extendidas para estar más cómodos, solo mientras llegaba el camión.
Más tarde
Max - eran las dos de la mañana, no podía dormir por el calor que estaba haciendo, me quise distraer en el celular, pero no tenía batería - demonios, esto era lo único que me faltaba - dije con algo de molestia, me levanté y me dirigí a la cocina por un vaso de agua, cuando de repente la luz se apagó y una mano me tomo del cuello, se me escapó un grito de horror, cuando escucho unas risas y se enciende la luz, era mi hermana menor, Edith.
Edith - te gusto la broma hermanito - lo dije entre risas, el me miró con algo de molestia y me dijo que porque había hecho eso, solo le dije que estaba aburrida y que no tenía sueño y me disculpé con el, Max se calmo y me dijo que fuéramos a dormir - lo bueno que no se despertaron mis padres - dijo Max y nos fuimos a dormir.
Horas después
Max - un par de horas después, me desperté con sueño, no quería levantarme, pero recordé que tenía que ir a mi nueva escuela, me levanté y me vestí, yo era mucho de utilizar ropa negra, así que me fui así vestido, al llegar a la preparatoria me quedé sorprendido, el lugar era grande, con lindas flores y plantas que adornaban los alrededores y era de cuatro pisos, no pude evitar sentirme nervioso, mi madre bajó del auto y me dijo - hijo, espero que te vaya muy bien y échale ganas, ya que la primera colegiatura no fue nada barata - mi madre soltó una leve risa, subió de nuevo al auto y se fue - bien, ahora solo somos mis nervios y yo - dije, mientras caminaba por los pasillos, había personas que voltearon a verme, pero eran más las chicas que me miraban, trate de no darle importancia, ya que a veces las miradas de las personas me ponían nervioso, estaba teniendo dificultades para encontrar mi salón, así que me hacerque a un grupo de chicos que estaban cerca - hola, mi nombre es Max, estoy buscando el salón 2103, soy de segundo semestre y estoy perdido - al decir eso pude notar que uno de ellos me empezó a mirar muy serio y yo comenzé a ponerme nervioso, hasta que el chico se empezó a reír - tranquilo, no se ponga nervioso, era una broma, mi nombre es Alejandro, pero puedes decirme Ale, el salón que estás buscando está en el segundo piso, del lado derecho, está justo por la oficina de la directora - me reí y le agradecí, me dirigí al segundo piso y después de unos minutos encontre el aula, entre y camine hacia los asientos del fondo, después una chica se acerca y me dice - hola, amigo, disculpa ese es mi asiento - me disculpé con ella y recogí mi mochila - amigo, el asiento de la lado está disponible - la mire y le agradecí, la chica se presentó - mi nombre es Lorena - hola, soy Max, un gusto.
Lorena - platiqué un rato con Max, cuando miro que llega mi amiga Doris, ella era una chica algo grosera y sin pena de decir las cosas, ella miro a Max y le dijo - oye, morro, muévete, ese es mi asiento - Max miro a Doris con pena y se disculpo, estaba recogiendo sus cosas, entonces le dije a Max que se detuviera - Doris, haz una excepción, el es nuevo y tenemos que tratarlo con respeto - Doris hizo una cara de molestia - esta bien, Lorena - Doris aventó su mochila hacia el asiento que estaba frente a mi y fijó la mirada en su celular y no nos hizo caso el resto del tiempo que tardo en llegar el profesor.
Doris - estaba un poco molesta, ya que Lorena tan siquiera pudo haberme mandado un mensaje, lo deje pasar, pero no le dirigí la palabra el resto de las clases, hasta la hora del receso, cuando ella me habló y me dijo que fuéramos a almorzar, acepté y empecé a caminar hacia la puerta - Doris, espera, Max, el chico nuevo vendrá con nosotras - mire a Max con desinterés y les dije que los esperaba en la cafetería.
Max - Lorena, creo que no le caí bien a Doris - Lorena trato de justificar a Doris, de que ella siempre era así, más con las personas que no conocía, solo que tuviera paciencia y dejará que ella tuviera confianza ya que ella por dentro era un amor, pero era evidente que no le caí bien, no me sentí mal, pero yo no había hecho nada, así que ya no quise pensar más en ello, llegamos a la cafetería y vimos a Doris sentada, tenía la mirada pegada en el celular mientras comía, no pude dejar de verla, me pareció una chica hermosa, Lorena se acercó con dos hamburguesas y me dijo que me invitaba una - no, como crees, Lorena, dime cuánto es - tranquilo no es nada, no acepto un no como respuesta - sonreí y le agradecí, Lorena le gritó a Doris si quería ir a los asientos del afuera, Doris se levantó sin despejar la mirada del celular, cuando se acercó con nosotros Lorena entre risas le dijo - siempre te la pasas pegada al celular hasta lo debes de tener pegado a tu mano - hay morra, a ti te encantan los cuernos que te ponen y no digo nada - le respondió Doris a Lorena, note que ellas se llevaban algo pesado, solo que Lorena era menos grosera y era más alegre, mientras que Doris era de un humor algo fuerte y era una chica que no tenía pena de nada.
Después de clases
Doris - mientras caminaba de regreso a mi casa, note que el chico nuevo estaba al lado mío, lo volteé a ver, el se dió cuenta y volteó a otro lado, entonces desvíe la mirada a otro lado, el me miró, fue tan incomodo y después intentó hacerme platica - hola, Doris ¿Verdad? Disculpa ¿Entendiste la tarea de química? Es que no entendí. - escucha wey, no me interesa si le entendiste o no, déjame en paz. - le respondí con algo de enojo, lo sé, fui muy grosera, pero esa era mi forma de tratar a las personas que no conozco, aceleré el paso mientras lo dejaba atrás, al llegar a mi casa mire a mi padre tirado en el suelo - ash, está borracho de nuevo - dije con enojo, camine a mi habitación y aventé la mochila al suelo, me acosté en la cama, tenía la mirada hacía el techo, mientras pensaba, hasta que escucho la puerta principal abrirse, era mi madre que llegó temprano del trabajo - hija, querido, ya llegué - grito mi madre, salí de mi habitación a saludar a mi madre, pero la ví levantando a el borracho de mi padre, después ella me dijo algo molesta que porque deje a mi padre ahí tirado en el suelo - haber madre, yo no lo mandé a tomar hasta perderse de borracho, yo no tengo porque ayudarlo - mi madre me me dió una cachetada, la mire molesta y corrí a encerrarme en mi habitación y ahí me quedé...
Continuara
Creadora: DEMOON