Capitulo 28: Ceremonia de la Noche del Diablo

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Rias estaba rodeada. 

En territorio enemigo, sin aliados a los que recurrir, se enfrentó a sus enemigos sola, armada únicamente con su ingenio y su voluntad.

No estaría mal decir que Rias estaba luchando por su propia vida.

Pero ella no se echaría atrás. 

Ella lucharía y moriría en esta colina si ese fuera su destino, y lo haría con orgullo.

"¡Gurren Lagann es la cumbre del anime Mecha!"

"Rias, Rias, Rias", Seekvaira Agares sacudió la cabeza como si estuviera viendo algo lastimoso. Cada uno de sus movimientos era elegante, como se esperaba de la heredera de un archiduque.

Respaldada por su nobleza, ella era el epítome de un joven noble demonio.

Ella también estaba completamente equivocada.

"La belleza de los mechas proviene de los detalles", pontificó Seek-chan. "De su viabilidad. La mecánica de su creación. Las estadísticas, el equipo y la posibilidad de construir y pilotear uno en un día. Una interpretación absurda de los mechas no puede acentuar adecuadamente la majestuosidad del género. Pierdes la gravedad, la majestuosidad, el peso. Cuando algo se vuelve demasiado increíble, pierdes la perspectiva. Es decir, Gundam es mejor... Macross también es una respuesta aceptable".

La nobleza que la rodeaba asintió en acuerdo con las palabras de su Rey.

Rias frunció el ceño. Después de no verla durante más de un año, había venido a hablar con su amiga y habían terminado en una discusión familiar. Ni siquiera tenía a Akeno para respaldarla, ya que su Reina estaba hablando con la Reina de Sairaorg.

Ella tendría que ganar esta batalla por sí sola.

"¡Somos demonios!", respondió Rias apasionadamente. "¡La lucha por sobrevivir como raza! ¡La búsqueda del poder! Gurren Lagann nos habla a un nivel que ningún otro Mecha lo hace. ¿No deberíamos crecer hasta estar a horcajadas sobre el universo, a 10,45 billones de años luz de altura? ¡Nuestro poder debe convertirse en el taladro que perforará el Cielo!"

Todos los que rodeaban a Rias estaban tan asombrados (en su mente) que no podían armar un contraargumento sin pensarlo detenidamente.

"Siempre pensé que Evangelion era el mejor anime de Mecha".

Silencio.

Silencio de muerte.

Como muñecas rotas, todas las cabezas se giraron lentamente para mirar al orador.

Uno de los nobles de Seek-chan, uno que Rias no reconoció, se sonrojó ante la atención.

—¿Qué? —chilló en voz baja, con los nervios fallándole.

"Mis disculpas, Lady Rias", dijo Alivian, la Reina de Seekvaira, mientras se inclinaba con pesar. "Es un peón recién reencarnado. Es joven y tonto y no sabe de lo que habla".

"¡Ey!"

"He sido negligente con su educación", suspiró Seekvaira, asintiendo también con la cabeza a modo de disculpa hacia Rias. "Créeme, cuando termine la reunión, dedicaré algún tiempo... a reeducarlo sobre lo que constituye un Mecha adecuado".

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