!!El fanart de la portada no es mío!!
¿Qué cosas oculta Sabo?
El pasado de Sabo es un misterio para todos, e incluso para él, pero, ¿qué oculta su memoria?
En esta "historia" vamos a repasar pedazos del pasado de Sabo, no van a tener un orden especí...
Mantuvo la cabeza de Sabo hundida en barril con agua, sujetandolo del pelo por la parte posterior de la cabeza, manteniendolo ahí unos segundos más. —¿Vas o no a hablar, princeso?— murmuró con una voz ronca, pero ligeramente aguda al lado del oido de Sabo, para que incluso con la cabeza bajo el agua lo escuchara. Jaló de su cabello hacia él para poder escuchar una respuesta fuerte y clara.
El de la cicatriz lo miró de reojo. Respirando agitado abrió la boca para hablar —Vete al diablo—. Murmuró con un gruñido y escupiendole en la cara; sonrió con ego mirando la cara de disgusto de quién lo tenía aprisionado.
Volvió a meter la cabeza de Sabo en el barril con agresividad —Maldito infeliz, qué les cuesta hablar, carajo—. Iba apretando el agarre en el cuero cabelludo del rubio con rabia hasta incluso ver pequeñas gotas de sangre saliendo de ahí. Apretó los dientes mirando con asco a Sabo, quién empezaba a desesperarse por la falta de aire, lo estaba dejando más tiempo bajo el agua de lo acostumbrado.
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—... stá bien.... n.. como se...— ........................................................
Sabo escuchaba una conversación por teléfono a lo lejos, o realmente no tan lejos.. oía todo con un ligero eco, ¿se había desmayado? Intentaba volver en sí mismo sacudiendo la cabeza continuamente, fastidiado por la vista borrosa. Minutos después logró divisar a aquel tipo que los mantenía ahí encerrados con la excusa más estúpida del universo.
Miró al rededor aún tirado en el suelo; volvió la mirada a sus manos, las cuales seguían cubiertas por completo por esposas de roca de mar. Esa mierda lo mantenía débil.
—Ajá.. Mierda que s- — BAM, por fin ese gran imbécil había caído inconsciente directo al suelo. Y detrás de él, se encontraba parado un Sabo tembloroso con un tubo de metal en la boca y el ceño fruncido, totalmente lleno de rabia. Había logrado alcanzar un tubo tirado por el suelo. Como no podía usar sus manos, optó por agarrarlo con la boca, aunque le preocupaba qué clase de infecciones podría llegar tener esa cosa.
