"Solo es un niño, cuando crezca se olvidará de esa promesa y conocerá a alguien más, ya verás."
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Sensei, me he convertido en un adulto ahora y desde que me convertí en ninja he completado más de cincuenta misiones contando desde las de rango má...
Naruto y sus compañeros de equipo habían vuelto de una misión algo pesada, o eso pensaba el resto del grupo mientras que para Naruto no lo fue, se sentía con mas energía que de costumbre. Pues, antes de ir a su misión un pequeño de cabellos azabaches se despidió de él con un pequeño pero demasiado lindo ramito de flores para el rubio, recibir aquel gesto se le hizo realmente adorable.
Parece que alguien anda muy alegre y energético que de costumbre. -Mencionó la pelirosa con una pequeña sonrisa pícara mientras que el otro pelinegro de tez pálida miraba a ambos con una leve sonrisa.- ¿Algo que no nos hayas contado? Sai y yo queremos saber ~ -Insistió la alfa.
Una pequeña risa escapó de los labios del chico de tez morena clara, con su diestra se rascó la cabeza con torpeza.- Me sentí motivado, es la primera vez que alguien aparte de la abuela Tsunade, me desea suerte en un misión. -Suspiró Naruto aunque con un leve sonrisa en sus labios.- Se sintió agradable...
¿Una chica? -Soltó el Beta pelinegro, haciendo que la boca de Sakura casi se caiga de tanto abrirla por la sorpresa.- ¿Es eso? -Pregunto ahora Sakura.
¿Qué? ¡No! Fue-..
¡Naruto! -La adorable voz de un pequeño de cabellos azabaches que corría en dirección del nombrado con un pequeño bento envuelto en un mantel de color naranja y una más que adorable sonrisa en su tierno rostro. Naruto lo esperó con los brazos abiertos para recibirlo con un cálido abrazo.
¡Sasuke! He vuelto ¿Lo ves? Siempre cumplo con mis promesas. -Resaltó con orgullo el rubio acariciando los desordenados cabellos del menor.
Eso quiere decir que puedo confiar en tí, Naruto. -Le sonrió el menor, Naruto sentía que moría de ternura cada que lo miraba.- Mira. -El pequeño le puso enfrente el bento envuelto en el dicho mantel.- Mi hermano me ayudó a prepararte algo de cenar. -La voz del pelo sonó un poco más tímida y presentando un notorio sonrojo en sus mejillas.
El gesto había sido tierno no solo para Naruto, sus dos compañeros también estaban mirando al pequeño con un sonrisa por su tierno acto.
Aww -Exclamó la pelirosa acercándose al infante con una tierna sonrisa.- Eres tan lindo ¿Cuántos años tienes, pequeño? -Preguntó animada posando su mano sobre el hombro del rubio inclinándose un poco hacia el pequeñín de linda sonrisa.
El pequeño borró su sonrisa e inflo sus mejillas formando un puchero en sus labios y frunció el ceño al verla tan cerca de Naruto, miró al nombrado con la misma expresión antes de hablar.- ¿Quien es ella?
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Oh, cierto, ella es Sakura -Señaló a la chica a su lado.- y él es Sai -Señaló al chico pelinegro que solo sonrió al ser presentado.- Ambos compañeros de equipo, chicos él es Sasuke es un pequeño que conozco hace muy poco.
Un gusto Sasuke -Saludo Sai al igual que Sakura, casi al mismo tiempo. El pequeño Uchiha miró a ambos y solo asintió con la cabeza, pero al momento dejó de prestarles atención a sus dos mayores para darsela al rubio que ahora sostenía el bento en sus manos.
Espero que..le guste lo que hice, aunque..no sepa tan bien. -Habló un poco avergonzado bajando la mirada con timidez mientras jugaba con sus dedos.
El rubio se hincó sobre su rodilla quedando a la altura del pequeño Sasuke, y acarició sus cabellos con ternura regalandole una hermosa sonrisa ante los ojos del pequeño frente a él.- Realmente lo agradezco, gracias por la comida, Sasuke.
Esas palabras hicieron que Sasuke sonriera y se sintiera enormemente feliz.- Trataré de esforzarme más cada día, ¡Lo prometo, seré un Gran futuro esposo para tí! -Esas palabras hicieron que Naruto se atragantara con su propia saliva mientras que los demás empezaron a reírse de la reacción que tuvo el rubio.- Solo te falta cumplir esa promesa ¿Aún la recuerdas? -Mencionó Sasuke inclinando un poco su pequeña cabeza a un lado mientras miraba al ojiazul.
Sí.. aún la recuerdo. -Confirmó en voz casi baja mientras bajaba la mirada algo apenado.
Naruto, Eres un cochino, es un bebé todavía. -Dijo con una sonrisa burlona mientras se cruzaba de brazos.- También un viejo puerco. -Le siguió Sai con la misma sonrisa que la pelirosa tenía.
¿Viejo? ¡Pero apenas tenemos doce años! -Reclamó mirando ofendido a Sakura y Sai.
Tengo ocho años, no soy un bebé y no le digas así a Naruto..Fea -Resalto esa palabra mirando a la pelirosa haciendo que la alfa se ofendiera y bajara la cabeza deprimida por escuchar algo "tan insultante" de un niño pequeño, eso hizo que Sai riera desviando la mirada.- ¿Y tú de que te ríes? Rarito. -Ahora Sai se calló bajando la cabeza ante la ofensa que eso le había hecho sentir, ahora Naruto era el que reía al ver a sus amigos de tal manera.
No le vuelvan a decir eso a Naruto, porque se las verán conmigo. -Dijo con seriedad acercándose al rubio para abrazarlo.- No dejaré que le hablen de esa manera a mi futuro esposo.
Mocoso..-Dijo Sakura enojada, una pequeña cena sobre salía de su frente por el coraje que le dió.- ¿¡Quién te enseñó a tratar así a tus mayores!? ¡Mocoso!
¿Tan vieja estas? -Se defendió el pelinegro dejando de abrazar a Naruto y ponerse frente a quien consideraba su oponente.
¡Irrespetuoso!
¡Fea!
¡Insolente!
¡FEA!
Ambos terminaron por mirarse con odio para luego cruzarse de brazos y darse la espalda.
Jum, estoy perdiendo mi tiempo, tengo un informe que hacer. - Finalmente se retiró la pelirosa ignorando el hecho que un pequeño le dijo Fea más de una vez.- Si, yo también, te ayudo con eso, Sakura. -Le siguió Sai despidiéndose del pequeño y su rubio compañero.
Ven, tienes que comer, si no se enfriará y luego te puede hace daño. -El pequeño Sasuke tomó la mano de Naruto llevándolo a sentarse a unas banquetas cercanas, ya sentados, Naruto abrió el bento y miró la deliciosa comida que contenia dentro.
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¡Se ve delicioso! -Expresó el omega con emoción miado la linda decoración del plato.
Buen provecho. -Dijo Sasuke al ver la mirada de emoción en el ojiazul.- ¿Tu ya comiste? -Pregunto Naruto mirando a su pequeño acompañante, este asintió con una sonrisa.- Lo hice, si no, mi hermano no me permitiria venir a verte.
Ayyy Eres tan buen niño ~ -Exclamó Naruto con una pequeña sonrisa, tomó los palillos y comenzó a degustar su almuerzo, como lo suponía, estaba delicioso.- Come un poco. -Con los palillos tomó un poco de arroz y lo llevo a la boca del menor.- Anda come.
Sasuke negó con las mejillas sonrosadas.- No, no, es para tí.
¿Le negaras la comida que te da tu futuro esposo? -Intentó chantajear al pequeño, sabía que si le decía eso iba a acceder y así fué, el pequeño termino comiendo con él aún con las mejillas rojas por la pena.
Ambos terminaron de comer mientras conversaban y reían, tanto que no se habían percatado que estaba aterdeciendo, así que Naruto llevó al pequeño hasta su hogar y agradeciéndole por última vez por la deliciosa comida se despidió con una sonrisa.
Y después de unos largos minutos caminando llegó a su hogar, su pequeño y solitario hogar.
