Hay mucha gente que no he visto en mi vida, y otros que sólo vi cuando tenía tres años. Es gracioso ver como esas personas, que antes me veían como si fuera un muñeco tonto, ahora lo que ven es un chico de diez años que ha cambiado a la fuerza.
Mi abuelo está aturdido, mis tíos tienen la boca abierta y mi padre casi se atraganta con el ponche de frutas.
No espero que estén todos de acuerdo con este cambio tan radical, y quizás mi cabello no está perfectamente cortado porque es difícil hacerlo uno mismo. Pero es innegable que el cambio deja clara muchas de mis intenciones. Si el abuelo quiere planear un esposo o esposa que sean adecuados para mí, va a tener que caminar un par de paso más rápido que yo, ya que juego con ventaja: Conozco el futuro de varios países, sus avances y sus desastres, y de momento no ha venido nada que marque un fuerte impacto en el mundo.
Sin embargo, cuando cumpla doce años sí. Ahí es cuando los eventos del futuro deberé de aprovecharlos, tomándolos para mí y dejando a otros sin nada; no por algo he tenido que modificar todos mis planes.
—Thanus... —El abuelo se acerca hasta donde estoy yo, dedicándole a él sólo una enorme sonrisa con un rastro de inocencia—. Tu cabello era muy valioso. Si querías cortártelo hubiéramos llamando al estilista, donando así tu cabello para la confección de pelucas al hospital.
—Tengo que hacerme consecuente de mis actos, abuelo, así que aceptaré el castigo que quieras darme si ese es el caso.
—No, aunque admito que el haberlo cortado de forma tan rara es confuso para mí —niega con la mano—. Además, es tu cumpleaños. Tienes otras obligaciones.
—Por supuesto, abuelo. Sé todo lo que tengo que hacer.
Es la parte más aburrida de un cumpleaños, y lo he visto todas las veces que mis primos han cumplido diez años. A Valerian no sólo le falta cordialidad sino que no tuvo ningún impedimento de quejarse de sus regalos; Urish intentó ser lo más amable y agradecido dentro de lo posible, pero terminó estrellándose contra su propia tarta por intentar alejarse de una niña que no dejaba de perseguirlo; el cumpleaños de Liliana fue aburrido, aunque su personalidad y educación es adecuada, era tan callada que prácticamente los temas de conversación morían demasiado rápido; y los gemelos... bueno... no hace falta decir que socializar no es su punto fuerte, sobre todo si no te consideran digno.
Me paso los primeros treinta minutos saludando, agradeciendo, y sobre todo siendo lo más educado posible frente a todas las personas que vienen a felicitarme al lado de mi abuelo y mi padre, el cual éste último sigue sin creerse que he cortado mi bonito cabello largo que Sasha me cuidaba con extremo cuidado. Un cabello que sé de sobra que le recordaría a su esposa, pero ella lleva diez años muerta y tiene que dejar de llorar cuando está perdiendo muchas oportunidades con su hijo.
Él es adulto, maldita sea.
Sé que la mayoría de ellos me han traído regalos, sólo para ganar el apoyo del abuelo para futuros proyectos, tratos, e incluso tener la oportunidad de intercambiar un par de palabras. Un cumpleaños no deja de ser tampoco un encuentro social donde los adultos hablan de sus cosas.
Y en el cumpleaños de mi mayoría de edad será peor, sobre todo cuando se reconozca públicamente que soy un "Langris".
—¡Hacemos un llamamiento especial para informarles que, el primer príncipe de Vanesha, Dilak Duvilam, ha llegado!
Sabía que ibas a venir a este evento, maldito sádico mentiroso...
Como cabe esperar del primer príncipe, siendo el futuro rey de su principado, Dilak llega con un elegante traje rojo y dorado porque eso hace contraste con nuestros ojos. Una clara evidencia de intenciones muy sutil que un niño no se daría cuenta, pero alguien inteligente sí. Avanza mientras las personas están sorprendidas, abriéndole paso como si fuera un príncipe de estas tierras, mientras su criada está detrás con lo que será un regalo de cumpleaños —que ni me importa—, y al lado de la mujer está Babel.
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Cuatro de corazones [Actualizada en INKITT]
Фэнтези[HASTA LA 1ª PARTE] ~~ Libro 1: 'Naipes Fantásticos'. El destino no sólo es caprichoso sino que también tiene un sentido del humor un tanto cruel, cuando Thanus descubre que morir una vez de una manera horrible no es, ni de lejos, lo peor que le h...