Lucifer es un vampiro que se oculta para no ser cazado, actuando como un padre religioso en público. Pero su paz se ve perturbada cuando conoce a Alastor, un cazador astuto y letal que hace de su misión acabar con él. A medida que Lucifer va descubr...
Los recuerdos del pasado pueden ser dolorosos, Y pueden atormentar el corazón con su tristeza, Nadie sabe cómo detenerlos, excepto el corazón mismo, Que guarda aquellos momentos y sentimientos con reverencia.
Las imágenes del pasado pueden volver en momentos inesperados,
Y traer consigo un dolor y una nostalgia insoportables,
Pero el corazón, a su manera, sabe cómo lidiar con ello, Y encontrar la manera de seguir adelante sin descanso.
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Nueva Orleans, Lousiana.
Año 1930.
―Lilith...??― Lucifer corría desesperadamente en busca de no perder a su amada esposa, su luz y esperanza, todo lo que necesitaba y deseaba, pero se fija que no puede avanzar ni un solo paso hacia ella ― !!LILITH!!― Lucifer la llama con miedo de perderla...Perderla de nuevo, en cada grito que da buscando que se dirija hacia él, pero cada grito era en vano. Lucifer observaba con tristeza y desolación cómo su esposa, Lilith, se alejaba de su vida, atrayendo un abismo insalvable entre ellos. Las lágrimas se deslizaban por su rostro mientras sentía cómo su mundo se tambaleaba y se derrumbaba ante sus ojos. Se sentía completamente solo y perdido sin ella, como si una parte esencial de él se hubiera marchado junto a ella. La desesperación y el dolor le inundaron por completo, sin saber cómo seguir adelante en un mundo en el que su amada ya no estaba.
Lucifer despertó sobresaltado, con las lágrimas corriendo por su rostro al recordar a su amada Lilith. Aunque en sueños había buscado desesperadamente su presencia, sabía que en vida y en sueños, ella siempre estaría fuera de su alcance. Su voz, aquella voz tan hermosa que lo había cautivado en tantos momentos, seguía resonando en sus oídos, haciendo que su estómago se revolviera tal como lo había hecho en vida. A través de la memoria y los sueños, ella seguía siendo su todo, y él había dado todo por ella.
― Soy un idiota―Lucifer reflexionaba con pesar y culpa, consciente de que su comportamiento había terminado lastimando a quienes más amaba. Su mente se llenaba de arrepentimiento y desesperación al pensar si las cosas podrían haber sido diferentes si hubiera tomado decisiones diferentes. Quizá si no hubiera dejado marcharse a Lilith, si hubiera sido un esposo y padre mejor, o si no hubiera existido, quizás sus seres queridos hubiesen sido más felices. Se sumergía en un mar de culpas y "¿y si...?" que lo asfixiaba y le llenaba de tristeza y pesar.
Y ahí estaba Lucifer, ahogado en su dolor, las lágrimas surcando su rostro mientras el peso del abandono lo consumía. Cada recuerdo de su amada era una daga que se le clavaba más profundo, un recordatorio constante de lo que había perdido. ¿Por qué se fue?, se preguntaba, atormentandose con la misma pregunta, como un eco que nunca cesaba en su mente.
"Es imposible seguir así", se decía, pero las palabras se desvanecen en el aire, vacías de significado. La soledad era una sombra implacable que lo seguía a cada paso, y la idea de salir de ese abismo le parecía, a veces, más lejana que nunca. El vacío que dejaba su ausencia lo ahogaba, y la falta de compañía, de amor y de apoyo, lo llevaba al borde de la desesperación.
