Shine a little of your light in my world of loneliness...

- Capítulo 33 -

Los días continuaron normales y alocados, no hubo nada malo excepto por el consumo diario de café pero solo eso, Andrés había tenido una plática consigo mismo sobre los daños que le causa beber alcohol, eso si el café nadie lo podía tocar ese nunca se iba a ir por más que le digan millones de personas que no lo tome. X acordó no volver a llevarlo a esos sitios o no seguidamente por lo menos.

Pasaron varias semanas y el novio de X ya se había estresado por no tenerlo cerca ya quería que regresara, pero sinceramente estaba muy bien con Andrés y en estos momentos no se encontraban en buenos términos que digamos.

Andrés se notaba más triste y apagado, se divertía mucho pero necesitaba a Ari y ver que quedaba mucho tiempo para volver a ver a su amado lo deprimía mucho.

También una visita inesperada fue a su casa, era su hermano, si bien era cierto que X y Andrés se llevaban muy bien Víctor también era un gran amigo de este pues era muy divertido y sabía poner el ambiente.

X abrió la puerta y dejó pasar a Víctor. -¡Holaa!- Este se intentó acercar para abrazarlo pero se retrocedió un paso.

-Nada de contacto físico, ya entendí.- Estos dos estuvieron conversando y por fin se dignó a bajar Andrés quien ya no salía mucho de su habitación.

Este dejó de ir a al escuela hace mucho tiempo pues no lo sentía necesario, simplemente compraba a sus maestros y tenía muchas habilidades como para hacer cosas por si mismo, como por ejemplo pasar un examen con el 100% y según es algo que si deba presumir pero realmente no le importaba nada, siempre lo elogiaban pero el simplemente ignoraba a todos y se iba, no le gustaba perder el tiempo.

Al no asistir a al escuela se ganaba el desprecio de sus maestros, pues casi siempre que estaba presente en la escuela, se dormía o le faltaba el respeto a estos pues no le parecía justo su agresivo método de enseñanza y siempre tenía que aprender de diferente forma desde su monitor.

-¿Qué está pasando?- Observo a una persona con X y se asomo viendo a su hermano. -¡Víctor!- Gritó emocionado Andrés.

Estos dos corrieron a abrazarse. -Hola hermanito, ¿cómo estás?- Se separaron y estaban muy felices.

-¡Muy bien!- Siguieron hablando de cosas que habían pasado junto con X, se pusieron a ver películas y cocinar, fue una tarde muy linda pero ya se tenía que ir este pues se había escapado solamente para verlo. Ya en la noche Andrés decidió quedarse con X, cosa que no había hecho desde hace mucho tiempo.

-...¿cómo conseguiste el número de Víctor?- Hace unos días su hermano se había comprado un celular pero solo tenía el contacto de Andrés.

-Simplemente agarré tu celular y ya... por cierto vas a tener más visitas para que no te aburras y mañana tienes dos.- X sonrió molestando a Andrés pues sinceramente solo quería dormir.

-No te preocupes enójate conmigo pero solamente lograrás poco, ademas ¿dijiste que querías conocer a mi pareja no?- Andrés se quedó pensando y se emocionó.

-¡Por fin después de casi ocho años! Ya hasta había pensado que eras algún tipo de loco esquizofrénico...

-Supongo que gracias, pero tampoco que parezca fiesta de payasos te me tranquilizas o se va a enojar y señorito el no tiene paciencia...

-¿Ni poquito?- X negó con la cabeza. -Posiblemente esté de mal humor conmigo pues no hemos estado bien estos días pero no hay problema.- Ambos sonrieron.

-¿Cuántos años tiene?- X se quedó pensando un rato pues si le había dicho pero siempre se le olvidaba ese tipo de detalles.

-Creo que 23 o 24 años... si por eso de los veintitantos años.- Andrés se quedó impresionado pues Ari tenía casi la misma edad que la pareja de X.