【𝐏𝐞𝐫𝐟𝐞𝐜𝐭 𝐦𝐚𝐧】✨️Chestappen✨️

Capítulo 9. Odio el alchol

Sergio solo tuvo tiempo para abrir los ojos, su rostro se tenso y su mente se quedó en blanco por unos minutos. ¿Qué demonios había dicho este sujeto?

Tomó por sorpresa a los presentes de igual forma, Oscar tan solo dejó escapar una leve risilla al notar la expresión de la "hermana mayor" de Checo.

—¿Esposo?—Kelly se giró hacía el frente del cumpleañero, su mirada se llenó de confusión acompañada de furia y frustración buscando una explicación.

El chico tragó saliva y en cuestión de segundos las voces del resto de los invitados se acumularon en susurros por aquellas personas entrometidas, solo era es gente al rededor suyo creando más conclusiones, ahora todo era un desastre.

Las manos de Kelly se cerraron en puños lentamente, su respiración se aceleró a medida en la que las personas comenzaron a notarla, ella en el medio de Sergio y Max al rededor de esa enorme tensión.

Verstappen solo sonrió, de nuevo.

Mientras todo esto pasaba, el impulso de uno de los presentes resaltó ante la ansiedad de la situación, Lando.

—Happy birthday to you...

El chico tomó el enorme pastel entre sus manos, prendió las velitas y se acercó hasta el cumpleañero, no tenía ni idea de lo que pasaba ni de lo que hacía pero de lo que estaba seguro era que debía hacer algo, o al menos eso le dijo su pequeña intención de relajar el momento.

Estaban presentes al menos 40 invitados, poco a poco ese salón fue llenándose en cantos confundidos ante la acción del chico, las personas solo continuaron cantando la tan tradicional canción del cumpleaños mientras el cumpleañero solo deseaba que se lo tragara la Tierra.
En el rincón Pato suspiraba rendido, todo se había ido a la borda.

—¿Quieres pastel?—Preguntó Oscar con cierta burla a la mujer enfadada, Kelly trató de mirarlo con paciencia, tomó la poca dignidad que le quedaba y con una última mirada fría se despidió de Sergio.

Kelly se había ido, de nuevo.

Pato notó todo esto desde lejos, se acercó hasta su novio y con un gran golpe en la nuca llamó su atención.
—¿Qué clase de amigo es este? Diferente, ¿Ah?—El más bajo continúo con otro golpe está vez en el hombro.—Esto es un desastre.

Los invitados continuaron en lo suyo, bebiendo, comiendo y divulgando conclusiones inventadas por ellos mismos ante lo ocurrido, mientras Sergio seguía atónito y enojado, Kelly se había marchado en su fiesta de cumpleaños, y lo había hecho estando enojada con él, todo gracias a un un sujeto desconocido.

Los ojos de Sergio seguían rastreando el lugar, había mucha gente bailando, bebiendo y o simplemente ocupando espacio en ese salón de paredes color neón y oscuras, aquel pastel que había decorado sus amigos ya ni existía, y el olor a alcohol era cada vez más pesado, sí se nota que Oscar lo había organizado, por lo tanto el asutraliano debería saber dónde estaba aquel sujeto, aquel tipo que solo se atrevió de decir que era su esposo y se marchó.

A los pocos segundos en su búsqueda visual por el chico, éste apareció. Bebiendo cerveza tranquilamente en una de las barras de bocadillos.

"Alcohólico"

Pensó al verlo.

—¿Qué demonios fué eso?—Cuestiono el chico más molesto tomado bruscamente el hombro de su oponente hasta hacerlo girar y que ambos quedarán de frente.

Max tomó un tragó más de su vaso, reacomodo sus codos un poco sobre aquella barra y alzó su mirada hasta cruzarla con el chico frente a él.

—Dije que eras mi esposo.

Sergio quedó un poco perplejo ante la sencillez con la que el chico ante él era capaz de decir semejante palabra, tal vez el sujeto ya estaba muy borracho y no sabía ni lo que decía, aclaró con un pequeño movimiento de cabeza su pensamientos y habló con coraje de nuevo.

—¿Con qué derecho? Ni siquiera te  conozco, ni siquiera me conoces.—La voz del cumpleañero se alteró más y continúo.—No tienes ni idea del problema que me has causado y yo no estoy en un humor de soportar está clase de estupideces y menos en mi cumpleaños... Mira sé que Kelly y tú tiene algunos asuntos del pasado pero no son mi culpa esas cosas, y yo no estoy para esa clase de juegitos.

Sus palabras fueron interrumpidas antes de qué siguiera con su reclamo, y fueron remplazadas por la voz del aquel problemático hombre.

—Para empezar no es ningún jueguito, si lo fuera no me habría casado contigo tarado.

Verstappen tomó otro trago, Sergio se limitó a verlo de nuevo está vez con más frustración.

"En verdad está borracho"

—Sé que odias el alcohol.—El más bajo se quedó cuestionando tales palabras del chico, lo miró por milésima vez con extrañeza y dió un análisis de nuevo, desde observar su larga camisa color violeta, sus pantalones holgados color marrón y el Rolex que llebaba en su muñeca izquierda.—Ya te dije que no es un juego para mí.—Repitió el rubio mientras tomaba el último trago que quedaba en su vaso, se levantó de su asiento y lentamente se acercó al cumpleañero. Sergio solo retrocedió en pequeñas pausas hasta quedar acorralado entre ese el otro cuerpo y la pared, su mente cuestionaba todo, está ya se la sabía, muy cliché en dramas y películas.—¿No me crees? Bien, casemonos de nuevo.

Y sin más tiempo que perder Max invadió los labios del moreno, claro en el tacto más leve posible, tal vez solo rosarón sus labios pero por lo menos ahora podría excusarse con que estaba "borracho" para tomar valor de hacerlo, después de todo no le gustaba que Sergio se enojara con él, así como Sergio odiaba el alchol.