Cubicity

¡Capítulo 1: Hablé con una chica invisible!

¡Capítulo 1: Hablé con una chica invisible?!

Izuku Midoriya estaba mirando al frente de la U.A. Hero Academy sintiéndose un poco mareado.

El aspirante a héroe había llegado con algunos minutos de sobra después de hacer una loca carrera a casa para tomar una ducha rápida, agarrar su mochila, y tome un viaje en tren de cuarenta minutos a la escuela. Apenas tres horas antes de que acabara de terminar sus agotadores diez meses de entrenamiento para preparar su cuerpo para convertirse en el recipiente para la peculiaridad Uno para Todos. El adolescente había hecho casi un año de ejercicios acrobáticos y trabajo físico intenso limpiando una playa llena de basura para su héroe ídolo All Might.

¿Y cuál fue su recompensa por sus esfuerzos? Un mechón del cabello de su mentor en su estómago.

Hoy fue la parte práctica del examen de ingreso. Izuku no estaba preocupado por la parte escrita, a pesar de que sentía que apenas la aprobaría, pero el examen práctico era una bestia diferente. Requeriría atrevidas hazañas de fuerza, destreza y dominio de la peculiaridad que la mayoría de los estudiantes potenciales habrían tenido durante más de una década para trabajar. Izuku había recibido su peculiaridad hoy, y las únicas instrucciones sobre cómo usarla de su mentor eran "Clarar el trasero y dejar que tu corazón gritara diciendo SMASH!" Midoriya deseaba tener más con lo que ir.

No ayudó al amigo de la infancia de Izuku, err bully, tal vez frenético; bueno, de cualquier manera, Katsuki Bakugo lo había amenazado con la muerte hace unos segundos. De acuerdo, el adolescente sensato probablemente solo quería amenazarlo con dolor físico por haberse atrevido a llegar para tomar el examen, pero eso todavía no era algo bueno. Así que ahora los sentimientos reprimidos de ser abusado y sentirse inútil de su pasado tratando con el explosivo usuario peculiar y otros matones estaban plagando la mente de Izuku también. Estos pensamientos fueron el punto de inflexión final. En la parte posterior de la garganta, Izuku podía probarlo, lo que quedaba de su desayuno. No había tiempo; tenía que encontrar un baño. La fuerza que pudo reunir lo llevó a un sprint decente mientras intentaba frenéticamente encontrar un baño. Después de dos minutos extendidos por los terrenos del campus, encontró uno.

Pero Izuku no lo logró. A solo unos pasos de la puerta de los hombres, tan cerca. Por lo general, después de la agitación, Midoriya se sentiría mejor; es la reacción típica que pensó. Pero hoy fue diferente, todavía tiene una cabeza giratoria y lágrimas en los ojos por una combinación de la sensación de ardor en las piernas y los pulmones, así como pensamientos acelerados de qué hacer al vomitar los terrenos de la escuela de sus sueños. También se había entristecido porque levantó el desayuno que su madre había trabajado tan duro para hacerle en tan poco tiempo cuando llegó a la casa hace apenas unas horas. Rodillas en el suelo y brazos apretando un poco de hierba, Izuku trató de juntarlo. A solo unos minutos para recogerse y limpiar su desorden, luego se dirigiría a la ceremonia de presentación, se dijo Izuku.

De repente, el sonido de una abertura de la puerta vino por detrás. Pasaron segundos de silencio cuando la mente del niño corrió con excusas para decir si se le preguntaba sobre su posición actual. Incluso se reposicionó para tratar de ocultar su obra puesta al descubierto en la hierba frente a él. Pero lo que vino después arrojó por completo tales pensamientos fuera de su cabeza.

"Estás tratando de imitar a una vaca o algo así? O tal vez una cabra," vino una risita femenina.

Todo se congeló en la mente del Midoriya. Oh, sólo tenía que ser una niña. Las interacciones positivas con el género opuesto fuera de su madre eran una rareza para el adolescente. Menos extraños al azar, realmente no podía pensar en ninguno. Los recuerdos de demonios en sus clases explotando la incapacidad de Izuku para defenderse volvieron a inundarse. Sus compañeros de clase se burlaban de que ninguna mujer estaría interesada en un extravagante como él, para vivir la vida sola. Reteniendo las lágrimas, el niño rápidamente sacudió la cabeza, pero la mantuvo alejada de quien estaba detrás de él.