HASTA TI

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Me acuesto en la lujosa cama al aire libre que Jung Kook tiene en su azotea, mis ojos están puestos en la piscina en donde él y Min Yoongi están. Estuve nerviosa todo el día, asustada de que Min Yoongi se diera cuenta. Jung Kook ha hecho lo que le pedí y ha mantenido las distancias, pero la forma en que me mira...

Jung Kook nada hasta las escaleras al borde de la piscina, y lo observo mientras las gotas de agua se deslizan por su piel. Lo extraño. Extraño poder acercarme a él y besarlo. Quiero pasar mis manos por su cuerpo y sentirlo tensarse bajo mis dedos.

Es difícil creer que puedo llamar a Jung Kook mi novio ahora, no puedo creer que sea mío. Ciertamente no se siente como que lo sea ahora que Min Yoongi está cerca.

Jung Kook camina hacia mí y me pongo de rodillas, mis mejillas se calientan cuando sus ojos recorren mi cuerpo, observando el diminuto bikini blanco que llevo puesto.

*Bikini de Aria

Sonrío cuando lo veo ponerse duro en sus shorts de baño empapados, y no puedo evitar reírme cuando se pasa una mano por el cabello con frustración.

―¿Por qué te ves tan hermosa? ―murmura, alcanzando la toalla en la cama. Miro más allá de él a Min Yoongi, que todavía está dando vueltas y sonrío mientras pongo mi mano en sus pantalones cortos, queriendo sentir lo duro que lo puse. Jung Kook se tensa, y su mirada se calienta.
—Nyx ―susurra, endureciéndose aún más.
—Te voy a follar en esta cama, tan pronto como tu hermano se haya ido, te arrastraré de vuelta aquí y te abriré las piernas para poder arrodillarme entre ellas.

Lo suelto y niego con la cabeza.

―Min Yoongi está caminando hacia nosotros ―le digo, y sus ojos se abren como platos. Mira sus shorts de baño y gime mientras se aleja, de espaldas a mi hermano. Desearía haberme ocupado de eso por él...

―Hola ―dice Min Yoongi.
—¿A dónde va Jung Kook?

Niego con la cabeza, incapaz de quitarme la sonrisa del rostro.