Confía en mí.

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Narra Suyeon

Estaba  sentada en la estación de los buses, tal vez encontré un poco de calor ya que estaba nevando mucho. Luego de unos minutos ya me estaba quedando dormida mientras me cubría con mi suéter, miraba hacia abajo con mucha preocupación muchas preguntas rodaron en mi mente.

— ¿Que haré? No tengo dinero y hace mucho frío... Realmente ya no se que hacer.

Decía mientras veía sus pies cubiertos de nieve, de repente siento una luz que alumbra, era de auto y levanto la cabeza para ver quién era y tal vez me den un empujón para llegar a la Posada, un señor sale del auto, no lo podía reconocer hasta que estuvo más cerca pude ver qué era de ese señor que no me ayudo contra el ladrón.

Decía mientras veía sus pies cubiertos de nieve, de repente siento una luz que alumbra, era de auto y levanto la cabeza para ver quién era y tal vez me den un empujón para llegar a la Posada, un señor sale del auto, no lo podía reconocer hasta que...

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— Hola, de nuevo. ¿Que haces aquí?

— No tengo a dónde más ir.

— ¿Por qué?

— ¡¿COMO QUE POR QUÉ?! Me robaron todo lo que tenía!

Dije algo enojada, como me viene a preguntar esa estúpida pregunta, si el mismo vio que me robaron todo. Me cubro más ya que el frío se vuelve más intenso.

— Si tan solo me hubieses ayudado a ladrón ese...!

Me empiezo a calmar poco a poco y veo para otro lado.

— Olvídalo, no vale la pena llorar por el pasado. Total no hay forma en que pueda recuperar mi cartera. Por qué rayos tuve que venir a Rusia...

Solte un gran suspiro para luego maldecir en tono bajo por el frío. — Entonces ¿Quieres venir conmigo? — la voz del señor me hizo volver mi mirada hacia a el. — Espera... ¿Eres un traficante de personas? Ni lo sueñes.

— Mmm... Soy algo parecido, pero te prometo que no te haré daño. Así que... ¿Vienes?

Mikhail extiende su mano para ofrecerla a la hermosa señorita coreana que estaba enfrente de el, sus miradas se toparon, algo en esas miradas dio una chispa, los ojos de Suyeon se iluminaron y acepta la mano del Ruso más alto que ella.

— Dime, ¿Cómo te llamas?

La pregunta de Mikhail rompió el lindo silencio que se formó en ambos por ese momento, Suyeon desvía la mirada algo sonrojada ya que era la primera vez que alguien la ve así.

— Suyeon... Y ¿usted?

— Soy Mikhail, es un placer conocerla señorita Suyeon.

Mikhail atrae la mano de la señorita y le da un tierno beso en ella, Suyeon avergonzado aparta su mano, una sonrisa en Mikhail apareció para luego tomar la mano de Suyeon y llevarla hacía el auto en dónde se encontraba Lev esperándolos.

— Vámonos, empezará a nevar mucho más que ahora.

— Está bien.

Suyeon se sube al auto en la parte trasera y Mikhail para no incomodarla se sienta en el asiento de copiloto y voltea a ver a Suyeon para pasarle un pinchito calientito y un termo en donde había café.

— Cubrete bien, y toma café.

— ¿No tiene droga? Digo es raro que me ofrezcas café.— Decía mientras se cubría con la sábana y olía el café para que no tuviera nada.

— Jajaja, claro que no. Confía en mí no te daría droga y dime dónde vives para que Lev te pase dejando.

— Mmmm, nosé si confíar en ti, pero bueno. Es el calle xxx por ahí déjeme señor Lev, por favor.

Suyeon le sonrió a Lev de forma amigable.

— Claro señorita, es un placer.

Lev empieza a manejar hacia la dirección que le dio la dulce coreana, aproximadamente 20 minutos llegan al destino de Suyeon.

— Le agradezco mucho que me haya venido a dejar hasta aquí, Sr. Mikhail y Lev. — Estaba a punto de abrir la puerta del auto, pero alguien más la abrió por mi y pude ver la sonrisa de Mikhail nuevamente y baje pero solo en  ponerme de pie casi me deslizó pero gracias a Mikhail no país eso y no me caí.

— Muchas gracias por traerme hasta aquí, y  también gracias por la sábana y el café, tenga buena noche Sr. Mikhail.

Apuntó de irme me toma de la mano de la misma manera que me la tomo cuando estabamos en donde se esperan los buses.

— Espero verte de nuevo — Dijo el Mikhail con una sonrisa mientras acariciaba un poco la mano de Suyeon, Suyeon luego aparta su mano.

— Tal vez, quién sabe y si me vez y me roban algo ayuda aún que sea. Bueno me voy, adiós Mikhail.

Suyeon se retiro mientras veía los ojos penetrantes clavados detrás de ella, hasta que por fin llegó a la entrada de la posada dejo de sentir esa mirada ya que Mikhail ya se había ido, al ver qué ya se había ido sale de esa posada y camina para otra posada que estaba a dos cuadras de la otra posada en donde Mikhail la dejo.

— Que tonto, pensó que le daría mi verdadero dirección ¡Ja! Malditos hombres piensas que si le dan un aventón a uno, ya caería uno a sus pies.

Al llegar a la Posada que era la verdadera, entra saludando a los dueños y dirigirse a su habitación, sin saber que ese Ruso que conoció hoy la siguio en todo el camino ey se rió un poco.

— Si que es una mujer desconfiada, vámonos Lev.

El auto arranca y se dirige hacia la mansión Lomonosov.


Holaaaa! Lamento la tardanza:'v esq estuvo ocupada con cosas de la vida 😔☝️ pero ya hay actualización nueva, agradezco a todos mis lectores por esperar mucho tiempo está actualización, espero les guste.
Nos vemos en la próxima actualización ✨ tomen agüita.

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⏰ Última actualización: Oct 31 ⏰

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