Chapter 12

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⚜️Voces⚜️

—Señor, encontramos algunas anomalías en el sistema de monitoreo, puede que se deba al fallo que hubo la semana pasada.—Un joven de no más de 25 años, redactó a las espaldas de un Hombre con gabacha blanca, leía desde un portapapeles, levantando las hojas para enumerar los datos y acontecimientos de el laboratorio, que se habían dado esa semana.

—¿La semana pasada?—preguntó volteándose, con las manos tras su espalda, sujetadas entre sí, analizando desde el balcón de hierro, todo el lugar, blanquecino y plateado, paredes, pisos y puertas del dicho material, parecía más una fortaleza que un campo de estudio.

—Así es, la abertura de la cápsula D1c, fila doce, al parecer no fue un accidente de la máquina, fue intencional.

—conque si ..— pensó el hombre de más de 50 años, pelo blanquecino y espalda un poco jorobada, analizando con su vista en el suelo lo que se le acababa de decir, y que para su desgracia, estaba confirmando las sospechas que tenía— se puede saber quien fue el elaborador de "El accidente"

—Lamentamos informar que no mi Señor, solo se ve que la cerradura superior no fue forzada y de el centro de control, nos tiro una terminete que el permiso había sido accedido, pero no fue confirmado para cerrar.

—Ya veo— asintió con la cabeza, viendo nuevamente hacia donde antes la tenía, encontrando las cápsulas con su tapa nuevamente puesta, varios frascos tamaño que sobrepasaban los tres metros de alto, estaban conectados con cables por la parte de atrás.

—¿Se le ofrece algo más señor?—preguntó el joven, después de un pequeño silencio, donde observó al mayor mirar atentamente una cápsula en específico.

—Si, dile a Ohm, que se presente en mi despacho.— y dicho eso se giró en su lugar y empezar a caminar y pasar al lado de el joven que estaba ahí— Nanon— se detuvo y puso una mano en su hombro — Gracias.

Se retiró, dejando a un castaño de hoyuelos asintiendo y con una sonrisa en su rostro.

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Para cuando abrió los ojos, no sabia  diferenciar si era de día, de noche, bueno, no sabía con ceteza, solo podía observar las luces de aquel lugar, blancas, como si de un hospital se tratase, lastimando sus ojos y dándole un zumbido fuerte en su oído izquierdo, provocándole unas pulsaciones en sus sienes que le hacían arrugar el rostro, llevando sus manos ahí, las empezó a frotar, y poco a poco se fue poniendo de pie.

Bueno, no literalmente.

Se incorporó, en el sucio colchón blanco y roto, para luego intentar levantarse, el sonido de las cadenas en sus tobillos hizo un fuerte sonido cuando movió sus piernas, miró entonces la puerta, sin embargo su tranquilidad no duró mucho al verla quieta,pues un golpe ensordecedor se escuchó.

—¡Buenos días princesa! —la voz tras la puerta fue acompañada con risas y carcajadas, eufóricas que gritaban cuán divertidos estaban los de el otro lado de la mencionada— ¿Desayuno a la alcoba? O ¿prefiere en el jardín para tomar té ?

Las risas no tardado en en escucharse, los golpes a empezar a estrellarse en la puerta de metal, parecía como si palmaran con fuerza, como si niños pidieran que se les abriese para salir a jugar.

Pero esos no eran niños, menos eran personas normales.

Eran, por decirlo así, adultos, varios adultos que bagaban en el largo pasillo, andaban en manadas o solos, pero siempre, siempre, siempre, terminaban en frente de la puerta que ahora estaban, molestando a un rubio que no sabía si lo más insoportable, eran sus risas o los golpes en la puerta.

WONKA //KOOKTAEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora