ALTAMAR - KOOKV

Prólogo

"Los Revolucionarios están atacando a nuestra gente, por favor tomen precauciones".

"Su majestad imperial, el emperador, ordenó qué por seguridad, su majestad imperial, la emperatriz abandoné el país".

—Debemos partir en seguida, mi señora.

—Extrañaré mi hogar, mis tierras y definitivamente mi vida en sociedad.

—Entiendo señora, pero no es seguro quedarse, incluso su majestad imperial, la emperatriz, partirá a América.

—Espero al menos ahí pueda casar a mi único hijo. —susurró Kim Yoona.

Antes de que la institutriz de aquella casa pudiera decir algo más, una presencia se hizo presente en aquel salón.

—El honorable presidente del consejo imperial, Kim Namjoon. —anunció un lacayo.

—Honorable consejero imperial. —dijeron ambas damas mientras hacían una corta reverencia.

—Yoona. ¿Donde está mi hermano? —preguntó Namjoon.

—Por favor sígame mi señor. —respondió la institutriz.

Namjoon haciendo caso a la mujer salió de aquel salón rumbo a encontrar a su pequeño hermano.

Sin importarle menos lo sucedido en el salón principal, Taehyung se encontraba en su habitación pintando un hermoso cuadro al óleo.

Cuando Namjoon irrumpió su tranquilidad, el doncel viendo que se trataba de su adorado hermano mayor, corrió a sus brazos para después sollozar.

—Shh Taehyung, calma pequeño, estoy aquí.

—No quiero irme Namjoon hyung, aquí están, mi vida, mi hogar, tú y mis amados cuadros.

—Solo será por un tiempo, además podrías asistir a la universidad.

—No me ilusione Namjoon hyung, sé muy bien que nosotros los donceles, no podemos asistir a una universidad.

—Aquí no, pero sí, en América.

—¿De verdad? —preguntó Taehyung alzando el rostro del regazo de Namjoon.

—Claro que sí, yo te prometo que pagaré tus estudios si decides ir a una universidad en América.

—Entonces, si quiero ir, Namjoon hyung.

—Me alegra mocoso. —dijo Namjoon muy sonriente.

—Hyung. ¿Vendrás a visitarme, verdad?

—Lo haré, lo prometo.

—El emperado-

—Está muy bien, solo anda enojado con la repentina decisión de la emperatriz. —antes de que Taehyung pudiera continuar con su pregunta Namjoon se apresuró a contestarle ya que sabía perfectamente cuál era aquella pregunta.

—Si yo fuera la emperatriz, no podría irme sabiendo que, quizás es la última vez que miraría a mi amado.

—Taehyung... —susurró Namjoon.

—Estoy bien, solo digo que, la emperatriz, es muy tonto para irse así no más.

—No te entiendo Taehyung. —dijo resignado Namjoon.

—Es que, Yoongi hyung es un tonto.

—Taehyung por dios, es nuestro emperador. —regañó Namjoon.

—Estoy terriblemente celoso de que lo haya elegido a él.

—Taehyung, tú eras un niño aún cuando nuestro emperador se unió a la emperatriz.