"Tu no te imaginas"
— Solo suéltalo —
Yang Zi me abrazaba fuerte, cuando se fueron en cuanto la puerta cerro caí rendido llorando sin parar, pueda que halla guardado tanto en contra de mi familia.
— En algún punto los llegue a odiar en mi adolescencia, pero no quiero algo malo para ellos aún así tampoco puedo odiarlos —
Sigo hablando entre lágrimas, dolía parece que el dolor seguía ahí.
— Diste un gran paso Yibo —
— No lo se, estoy tan confundido —
— Es entendible estas soltando todo lo que te estabas obligando a tener agarrado, ¿me puedes decir el motivo? —
— Conocí a alguien —
— Ya veo —
— Es tan parecido a Sung Joo —
— Estás tratando de reemplazarlo —
— Es lo que yo también creo, me dijo que le gustaba, pude ver esas estrellas en sus ojos, aquellas que me lo hacían recordar a Sung Joo, pero no quiero que sea así —
— Te entiendo y supongo que tomaste un decisión por eso —
— También me gusta Zhan, sentía eso que sentí con Wen Han, pero aún no estoy listo además no lo quiero lastimar yo —
— Quieres sanar primero —
Sentí que por primera vez en mi vida alguien me entendía, comprendía las palabras que gritaba mi mete ¿Pero acaso no siempre fue así con Yang Zi?
— Siento que es mejor hacerlo lejos, ya que solo me gusta Zhan no quiero ilusionarlo o ilusionarme es por eso que quiero irme lejos —
— Sabes Yibo, he sido tu psiquiatra tanto tiempo y esto es algo que me alegra es la primera vez que te veo tan decidido no sé quién sea Zhan, pero me agrada —
— Si a mi esposa le agrada a mi también, Yibo te das cuenta que no estás solo somos varios contigo —
Liying entro a la sala a abrazarme también, por primera vez me sentí en casa, así como en los brazos de Sung Joo y Wen Han así que sentí que era lo correcto.
— En Australia hay una buena clínica que te puede ayudar, a partir de ahora va a ser más difícil así que no te rindas porque estamos contigo —
Solo asentí, está era la oportunidad que esperaba muy en el fondo, este rayo de luz que me dejaba ver de nuevo un camino.
Había soltado aquello que tenía con mi familia, sentía que aquellas cuerdas con las que me hacían bailar desaparecían, junto aquel peso que llame "deuda"
— ¿Estarán conmigo? —
Mi mente quería confirmarlo, quería escucharlo, quería aferrarse a las siguientes palabras.
— Estaremos en cada paso que estés —
Una vez mi papá de crianza dijo, la familia de sangre no la elegimos así que no te sientas presionado a quererlos, en camino a aquellas personas que elijes tener a tu lado con diferencias y todo a aquellas que decides amar esa es tu familia.