Corazón Acelerado

Capítulo #5

Annie

-¿Se puede saber que carajos te sucede?-grita Cristian.

-Cris... -trata de calmarlo Sofi levantándose y tomándolo por el brazo.

-No te metas Sofía -no la deja ni hablar - tomas tus cosas y te vas sin decir nada, te pasas días sin comunicarte y ahora vienes como si nada- eso me lo dice a mi gritando.

-A mi tú no me gritas- le advierto un poco arta de la situación.

-Te grito si me da la gana.

-Pues mira que no - digo ahora también alzando la voz - No eres nadie para decirme que hacer Cristian.

-Soy tu hermano eso es suficiente creo.

-Si claro ahora sí eres mi hermano y ahora sí que tienes valor para gritarme pero fuiste un cobarde por ocultarme sobre Hugo Petrov- le grito y su cara cambia por completo- ¿que pasa?, ahora te sorprendes te escuché, escuché todo lo que hablabas con un hombre en tu despacho a altas hora de la madrugada y aún asi vienes y me dices que hacer, pues no, estas muy equivocado y si no quieres que actúe por mi cuenta tú y yo vamos a acabar con es maldito los dos juntos.

-No, no voy a permitir que ese loco te haga daño Annie- dice con preocupación pero está vez sin alzar la voz.

-Me sé cuidar sola ya lo sabes y no pienses que me voy a quedar de brazos cruzados yo voy a tomar venganza porque ese hombre me quito lo más preciado que teníamos, nuestra familia.

-Pues no lo voy a permitir tú- me vuelve a gritar está vez señalandome con un dedo- vas a estar alejada de todo eso y punto.

-Tú a mi no me das órdenes y no quieras sacar los demonios que llevo dentro porque te lo advierto no te van a gustar.

- No sabes nada de mi mundo, no sabes usar armas, ni puedes crear estratégias, ni tan siquiera tomar el volante- (y hasta ahí colmo mi paciencia, no sabía usar armas, no pues yo se lo iba a demostrar), asi que tome la que traía y le apunte, Sofía hizo el intento de acercarse,( si siempre ando armada porque si sé usar todo tipo de armas tome clases a escondidas).

-Annie no -dice Sofi con los ojos abiertos, miro a mi hermano fijó él sabe de lo que soy capaz de hacer por los míos así sea acabar con todos, pero no con él aunque esté dolida nunca le haría daño, entonces siento algo que me toca en la cabeza.

-Baja el arma -dicen en mis espaldas y reconozco la voz es aquel mismo hombre.

Enseguida la piel se me vuelve a erizar por su tono de voz, pero no me intimida así que me giro y le termino apuntando a él, cuando lo detallo me quedo emboboda por el hombre que tengo enfrente apuntandome con un arma y no puedo pensar en otra cosa que no sea lo ebueno que está

Tanto que me tengo que dar una cachetada mental para que no note como me lo deboro con la mirada, optó por mostrarle mi mejor sonrisa.

-Bienvenido, con usted quería hablar- digo y veo un poco de confusión en él, (que hombre Diosito).

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Una hora después

Estábamos los cuatros sentados en el salón, solo estaba ahí porque me interesaba una explicación de parte de todos ellos( y me la van a tener que dar porque si no, no los dejaré tranquilos). El tal Alexander( si también había investigando sobre él), no se mucho pero si lo esencial, sé que es socio de mi hermano que se conocieron en los Estados Unidos, en fin solo se la relación que tiene con Cristian.

-Mira Annie tienes que entender el porque de mi silencio, no queria involucrarte en esto, ese tipo es muy peligroso tenía una gran obsesión por apoderarse de los laboratorios y cuando nuestros padres se negaron ya sabes lo que hizo.

-¿Para que quería los laboratorios?- le pregunté con una punzada en el corazón por lo último que dijo.

-No estoy seguro, creo que era para crear un tipo de droga o veneno no lo se bien, pero si sé que muy peligroso tiene toda la justicia de su parte, aunque no se si haya justicia todavía.

-Maldito -susurro refiriendome al tipo ese- ¿que planes tienes entonces?.

-No pienso decírtelos.

-Hay por favor Cristian- le digo.

-Tenemos pensado integrarnos en su mundo, llamar su atención y acercarnos a sus seres queridos por si así se puede decir, en fin por ahí empezaremos- responde Alexander mientras nos habíamos quedado mirandonos fijamente.

Sofía hace un ruido con su garganta para llamar nuestra atención -Bueno y como lo hacemos- habla .

-Ya dije que ustedes no harán nada- responde Cristian.

-Y yo recuerdo haberte dicho que tú no me das órdenes, así que me incluyes en tus planes o ejecutó yo los míos, tú eliges -le digo mirándolo fijamente.

Él suelta un suspiro señal de haberse dado por vencido- Está bien, pero lo haremos todos juntos, cada movimiento de ustedes lo tenemos que saber nosotros, ¿ok?.

-Si -respondemos las dos al mismo tiempo.

-Bien - dice Alexander poniéndose de pie - Me tengo que ir, ya hablaremos - le dice a mi hermano, luego se gira hacia mí- Un gusto conocerla - dicho esto se va y me deja aún más embobada, (Este hombre).

-Yo también me voy - digo

Sin mirar a atrás subo las escaleras directo a uno de los baños que tiene la casa. El baño es grande todo es de lujo tiene una bañera cuadrada bastante grande y en el centro de está un ducha que ocupa todo aquel espacio, súper relajante ( lo que más me hace falta en estos momentos), me desago de mi ropa y entro. Mientras estoy sentada el agua tapa todo mi cuerpo mientras refresco mi mente y luego de horas allí dentro salgo, me pongo una bata y salgo hacia mi habitación, ya estando en está me pongo mi pijama lista para dormir, apago las luces quedando profundamente dormida.

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A la mañana siguiente despierto con ánimos y lista para todo lo que me prepara el futuro ahora que sé la verdad. Tomo un baño, me pongo la ropa de entrenamiento y me dirijo al gimnasio para ejercitarme, Sofi despertó temprano para entrenar juntas y luego de dos horas entrenado decidimos tomar un descanso.

-Ufff estoy sin aliento - dice Sofi tomando el pomo con el agua.

- Esto hay que hacerlo más seguido para estar preparadas.

-Si lo sé, ¿pero como piensas hacerlo tú?. Sabes que este tal Hugo es del bajo mundo.

- Sofía lo dices como si nosotras no conociéramos de más ese mundo, te recuerdo que no éramos muy santas que digamos.

-Je, si pero aún así tú no puedes hacer muchas cosas que digamos.

-En dónde único no puedo ser de mucha ayuda es en la carreras, pero eso no quiere decir que no pueda hacer nada.

-Al menos que.... Ya sabes trates de...

- Se me es imposible y aunque lo intente no podré y lo sabes.

- Mira Annie lo único que sé es que si quieres cobrar venganza tienes que primero dejar tus traumas atrás para cuando llegué el momento acabes con todo a tu paso como antes lo hacías así que ponte a pensar en que de verdad tienes que prepararte - dijo para luego irse.

Me quedé unos segundos mirando a la entrada del gimnasio por donde había desaparecido Sofi, no podía de dejar de pensar en sus palabras en cuánta razón había en estás. Seguí entrenando sola, ida en mis pensamientos hasta que fui vencida por el cansancio y opté por darme una ducha.

El resto del día me lo pasé tranquila leyendo en la biblioteca, no había visto más a Sofi después de la conversación que tuvimos y a Cristian menos. Cuando llegó el horario de cenar fui directo al comedor, me tocó cenar sola al igual que en el almuerzo,(¿En dónde diablos estarán todos?), terminó con la cena y cuando justo me levanto de la silla entra una de las chicas de servicio avisándome de que me esperaban en el salón, cuando le pregunté quienes eran y me dijo, ya sabía que no había nada bueno.