Capítulo 2

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LUCAS

El sol apenas asoma cuando me despierta el sonido del despertador. Me levanto y me preparo rápidamente, con la misma rutina de siempre. En mi coche, hacia la universidad, donde trato de concentrarme en las clases, aunque mi mente siempre vuelve a ella.

En el campus, me encuentro con Noah, que tiene una rara mañana libre de trabajo. Nos dirigimos a la cafetería para tomar un café y ponernos al día.

—¿Cómo va el trabajo? —Le pregunto, mientras tomamos asiento.

—Bastante bien. He estado trabajando en un caso complicado, pero finalmente veo algo de progreso. Y tú, ¿cómo estás? —musita Noah, con una expresión de preocupación.

—No ha sido nada fácil, pero tener a los chicos y a ti cerca ayuda mucho —respondo sinceramente.

Justo en ese momento, Sophia y Regina entran a la cafetería y se unen a nosotros.

—¡Hola, chicos! —saluda Sophia, con su energía contagiosa dándole un beso en los labios a Noah y se sienta a su lado.

—¿Cómo va todo? —pregunta Regina, mientras se sienta junto a mi.

—Lo mismo de siempre. ¿Y ustedes? —respondo, tratando de mantener la conversación ligera.

—Tenemos una idea —anuncia Sophia, con una sonrisa enigmática—. Hemos estado pensando en organizar un pequeño evento benéfico en el campus. Algo para recaudar fondos para la investigación de lesiones cerebrales. Creemos que podría ser una buena forma de hacer algo positivo.

Me quedo pensativo un momento. La idea es buena, y cualquier cosa que pueda ayudar a otros en la situación de Isabella es bienvenida.

—Me parece una gran idea. Podríamos involucrar a más gente del campus y crear conciencia sobre este tema —digo, sintiendo un renovado sentido de propósito.

—Perfecto. Entonces, ¿nos reunimos esta tarde para empezar a planear? —propone Regina.

—Claro. Después de clases, nos vemos en la biblioteca —respondo, con un ligero entusiasmo.

✿᯾✿

Durante el resto del día, trato de concentrarme en mis estudios, pero no puedo evitar pensar en el evento benéfico. Es algo positivo, algo en lo que podemos trabajar juntos, y me da una sensación de control y concentración en medio del caos.

Después de clases, nos reunimos en la biblioteca. Además de Sophia, Regina, Violeta, Cameron, Javier, Samantha, y Julián también se unen. Nos sentamos en una mesa grande, llenando el espacio con papeles, ideas y entusiasmo.

—Estaba pensando que podríamos hacer una feria con puestos de comida, juegos y algunas presentaciones en vivo —sugiere Cameron.

—Podríamos hablar con algunos maestros y pedirles que nos ayuden a difundir el evento entre los estudiantes —añade Javier, siempre pragmático.

—También podemos crear una página en redes sociales para promocionarlo. Todos podemos invitar a nuestros amigos y familiares —propone Regina.

Pasamos las siguientes horas planificando los detalles, delegando tareas y asegurándonos de que todo esté cubierto. Al final de la reunión, me siento más animado de lo que me he sentido en mucho tiempo.

Esa noche, regreso al hospital. La habitación de Isabella está tranquila, y me siento a su lado, tomando su mano como siempre.

—Isa, hoy tuvimos una reunión increíble. Vamos a organizar un evento benéfico para ayudar a otros que están pasando por lo mismo que tú. Todos están muy emocionados, y yo también. Esto es para ti, para nosotros. Sé que te encantaría estar ahí, y en cierto modo, lo estarás.

Paso un rato hablándole sobre los planes, las ideas de nuestros amigos y cómo todos se están uniendo para hacer algo positivo. Es reconfortante sentir que estamos avanzando, incluso en medio de la incertidumbre.

Cuando finalmente me despido de ella esa noche, me siento más esperanzado. Tal vez no podamos cambiar el pasado, pero podemos hacer algo positivo en el presente. Y eso es suficiente para seguir adelante, un día a la vez.

NOAH

El siguiente día, tengo una audiencia importante, pero antes de irme, decido pasar por la habitación de Isabella. La responsabilidad del trabajo pesa sobre mi, pero nada puede detener mi amor y preocupación por mi hermana.

—Hola, Isa. Sé que Lucas ya te contó sobre el evento benéfico. Voy a hacer todo lo posible para ayudar también, en lo que pueda. Te extraño mucho, y no hay día que pase sin pensar en ti. Papá... también está muy mal, se la pasa en casa, pero Jessica lo cuida. Aveces siento que papá está apunto de perder la cordura, todo esto le está afectando mucho... Aunque sé que despertarás pronto —siento un nudo en mi garganta y tengo que tragar saliva pero eso solo lo hace más pesado—. Te extraño muchísimo, chispitas.

Las lágrimas salen de mis ojos automáticamente, viéndola con los ojos cerrados desde esa noche...

La beso en la frente y me despido, sintiendo una mezcla de desesperanza y dolor. La vida sigue, y debo encontrar un equilibrio entre mi trabajo y mi deseo de estar con Isabella.

Esa tarde, después de mi audiencia, me uno al grupo en la universidad. Decidimos reunirnos en el campus para seguir planificando el evento benéfico.

—¿Cómo fue la audiencia? —pregunta Cameron, mientras todos se sientan en el césped.

—Bien. Afortunadamente, todo salió como esperaba. Ahora, estoy aquí para ayudar con lo que necesiten —respondo, mostrando una sonrisa.

El equipo sigue discutiendo detalles, desde la organización de los puestos hasta la logística de la promoción. La energía del grupo es contagiosa, y me siento agradecido de tener amigos tan dedicados.

—Noah, pensábamos que podrías hablar con algunos de tus colegas abogados para ver si podrían donar algo para la causa. Tal vez una consultoría gratuita o algo así —sugiere Sophia.

—Buena idea. Conozco a algunas personas que podrían estar interesadas en ayudar —respondo, anotando la idea.

✿᯾✿

El resto de la semana pasa en un torbellino de actividades y planificación. Cada día, después de clases y trabajo por mi parte, todos nos reunimos para afinar los detalles del evento. Las relaciones entre nosotros se fortalece aún más, unidos por un objetivo común.

El día del evento finalmente llega. El campus está decorado con colores brillantes, y los puestos están llenos de actividades y delicias. La energía es palpable, y la comunidad universitaria responde con entusiasmo.

Lucas se mueve entre la multitud, agradeciendo a todos por su participación. Sabe que esto es solo un paso, pero es un paso en la dirección correcta. Y mientras observa a sus amigos, siente una chispa de esperanza renovada.

Después del evento, nos reunimos en una cafetería cercana para celebrar.

—Hoy fue un gran día —dice Julián, levantando su vaso en un brindis improvisado.

—Definitivamente. Hicimos algo realmente bueno aquí —añade Samantha, con una sonrisa.

—Gracias a todos por su increíble esfuerzo. Esto es solo el comienzo —dice Lucas—. Quizás Isabella no necesite de esta recaudación porque yo mismo estoy pagando por su estabilidad en el hospital, pero hay personas que no tienen los recursos y me alegro de que podamos ayudar a más personas que estén pasando por lo mismo que Isabella y poder hacer que las familias estén más esperanzadas...

El grupo brinda y disfruta del momento, sabiendo que, a pesar de las dificultades, estamos construyendo algo significativo juntos.

Petals Of Love (Petals #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora