Capítulo 1: Encuentro de Universitarios

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Max caminaba con determinación hacia su clase, el sonido de sus pasos resonando en el pasillo de la universidad. Su cabello negro desordenado se balanceaba ligeramente con cada movimiento, y sus ojos color café observaban a los estudiantes que pasaban a su lado. Llevaba puesta una sudadera roja que le quedaba grande, sus mangas ocultando parcialmente sus manos enguantadas. Esa ropa holgada era una especie de escudo para él, una manera de sentirse cómodo y protegido.

Al llegar a la entrada del edificio principal, vio a sus dos mejores amigos esperando. Bobby estaba, como siempre, con su lata de queso. Era un chico peculiar, con una obsesión casi cómica por el queso y una cabeza rapada que contrastaba con su vello facial anaranjado. Bobby levantó la mirada y saludó a Max con entusiasmo.

-¡Max! ¿Listo para otro día de aburrimiento académico?- Bobby hizo una mueca exagerada mientras se llevaba otro puñado de queso a la boca.

Max se rió y le dio una palmada en la espalda. "Sí, Bobby. Pero, ¿qué sería de mi vida sin tus comentarios pesimistas y el olor a queso que dejas por donde pasas?"

PJ, su amigo felino robusto, estaba sentado a un lado, observando la escena con una mirada pensativa. Su pelaje negro lustroso, y sus ojos verdes brillaban con sabiduría. PJ no era un gato común; siempre tenía una perspectiva filosófica sobre cualquier situación.

-La vida es un río, y nosotros solo somos hojas flotando en su superficie, buscando nuestro destino- dijo PJ, su voz grave y resonante, llena de significado.

Max sonrió y negó con la cabeza. -Gracias por tu sabiduría, PJ. Vamos, no queremos llegar tarde.-

Mientras se dirigían a sus clases, Max no pudo evitar notar a Bradley al otro lado del pasillo. Con su cabello castaño claro cuidadosamente peinado y ojos azules que parecían ver a través de la gente, Bradley destacaba entre la multitud. Era más alto que Max, aunque este último había crecido considerablemente en el último año, acortando la diferencia entre ellos. Los dos intercambiaron una mirada hostil, como siempre.

Bradley caminaba con la cabeza en alto, su espalda recta y su andar seguro. Vestía una camisa blanca ajustada que destacaba su esbelta figura y su pequeña cintura, su ropa siempre impecable, un reflejo de su deseo de perfección y la constante búsqueda de la aprobación de su estricto padre. La tensión entre ellos era palpable, una corriente eléctrica invisible que los mantenía en lados opuestos de cualquier habitación.

Max apretó los puños y se obligó a mirar hacia otro lado. No entendía por qué Bradley siempre lo sacaba de quicio, pero sabía que no podía permitirse perder la compostura antes de su clase. Ingresaron al aula y se sentaron juntos los tres amigos, como de costumbre. La profesora ya estaba en el frente, preparando sus materiales para la lección del día.

Durante la clase, Max trató de concentrarse en las palabras de la profesora, pero su mente seguía volviendo a Bradley. Había algo en él que lo intrigaba, algo que no podía descifrar. Su rivalidad había comenzado desde el primer día de universidad, cuando ambos habían competido por el primer lugar en los juegos extremos. Desde entonces, habían estado atrapados en una constante batalla de voluntades.

Al final de la clase, Max recogió sus cosas y se levantó de su asiento. Bobby y PJ ya estaban esperándolo en la puerta. Mientras salían del aula, Max no pudo evitar lanzar una última mirada en dirección a Bradley, quien parecía estar absorto en una conversación con otro estudiante.


......

Después de clases, Max, Bobby y PJ se dirigieron a la cafetería del campus. Era un lugar bullicioso, lleno de estudiantes charlando y disfrutando de sus almuerzos. Eligieron una mesa en una esquina tranquila, donde PJ podía filosofar a sus anchas sin demasiadas interrupciones.

Bobby inmediatamente sacó una lata de queso nueva que tenia en su mochila y comenzó a devorarlo. Max sacudió la cabeza con una sonrisa. -Bobby, un día vas a convertirte en una lata de queso.-

Bobby se encogió de hombros. -Podría ser peor. Al menos el queso es delicioso.-

PJ, sentado elegantemente sobre la mesa, observaba el ir y venir de los estudiantes. -El universo conspira en formas misteriosas- dijo, su voz llena de gravedad. -Cada encuentro y cada desencuentro tiene un propósito en el gran esquema de la existencia.-

Max suspiró. -A veces desearía entender lo que dices, PJ.-

Mientras hablaban, Bradley entró en la cafetería. Max lo vio de inmediato y notó que estaba solo, algo poco común. Normalmente, Bradley estaba rodeado de otros estudiantes, admiradores y seguidores que parecían gravitar a su alrededor. Hoy, sin embargo, su expresión parecía más sombría, y su paso menos seguro.

Bradley se dirigió al mostrador, pidió un café y se sentó en una mesa cerca de la ventana, lejos de la multitud. Max no pudo evitar observarlo, notando la tensión en sus hombros y la mirada pensativa en sus ojos. Por un momento, sintió una punzada de curiosidad y preocupación.

-¿Te importa si nos sentamos aquí?- La voz de Bradley interrumpió sus pensamientos. Max parpadeó, sorprendido de ver a Bradley de pie junto a su mesa, sosteniendo su bandeja.

-Eh... claro,- dijo Max, tratando de disimular su sorpresa. Bobby y PJ también parecían sorprendidos, pero no dijeron nada.

Bradley se sentó, colocó su café sobre la mesa y suspiró. "No pensé que hoy necesitaría compañía, pero parece que este día tiene otros planes para mí."

Bobby, siempre directo, preguntó: -¿Qué te pasa, Bradley? No es común verte solo y... bueno, abatido.-

Bradley miró a Bobby y luego a Max, como si evaluara si debía o no compartir sus pensamientos. Finalmente, habló. -Es mi padre. Siempre quiere más de mí, nunca es suficiente. Hoy tuve una discusión con él y... simplemente necesitaba un lugar donde no pensar en ello por un rato-

Max sintió una ola de empatía. Sabía lo que era tener expectativas puestas sobre uno mismo, aunque sus propias luchas eran diferentes. -Siento escuchar eso,- dijo suavemente. -Aquí puedes relajarte. Nadie te juzgará.-

Bradley asintió, agradecido. -Gracias, Max. A veces, solo necesitas un lugar donde puedas ser tú mismo, sin presiones."-

Mientras conversaban, Max comenzó a ver a Bradley bajo una nueva luz. Tal vez había más en él de lo que aparentaba, y tal vez, solo tal vez, podrían encontrar una manera de superar sus diferencias.

Bajo la superficie/MaxleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora