Prólogo

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Era una tarde bella en el Reino del Trébol, donde hombres, mujeres y niños disfrutaban de su vida como era costumbre ya que sabían que existen los mejores Caballeros del Reino. Uno de estos era Asta, nuestro protagonista que se encontraba en el Castillo del Trébol, exactamente en la casa real de los Vermilion donde en estos momentos había un parto.

Asta: ¡Dios! ¡Dios! ¿Estará bien Mimosa?... ¡Si! Debes calmarte Asta, ella está bien. No puedes perder la calma en estos casos, ella está siendo atendida por los mejores médicos. -un pelo cenizo de buena musculatura, una baja altura y que en sus hombres cargaba el manto de los Toros Negros-

Yuno: Debes tranquilazarte Asta, ella estará bien. Es de la realeza al fin de cuentas y también quiero decir que al fin de todo me ganaste en algo. -decia un pelo negro de alta estatura, con un grimorio de trébol de cuatro hojas y que encima cargaba el puesto de Capitán de Orden de Amanecer Dorado-

Asta: Lo dices como si no fuera tu novia. ¡Ahi esta mi hijo Yuno, está apunto de nacer! De verdad que esto me pone más de nervios que cuando nos enfrentamos a la Pica o a los Elfos. -seguia un Asta que se movía de lado a lado mientras se mordía las uñas por la ansiedad-

Liebe: Chico tómalo tranquilo, es una Vermilion. No por nada es Mimosa la que tiene la mejor magia curativa, tu hijo va salir sano y fuerte como tú y guapo y bello como su madre. -decia Liebe el demonio de Asta manifestándose en su hombro-

Yuno: Liebe tiene razón Asta, tómatelo con calma. Saldrá bien. -decia un Yuno aue estaba sentado tranquilamente-

Sylph: Mi Yuno tiene razón, el parto saldrá como normalmente debe salir enano. -decia la espíritu de viento mientras le jalaba con un poco de fuerza el cabello de asta-

Asta: ¡Ayyyy! ¡¿A quien llamas enano?! -decia un asta que estaba apunto de estallar de ansiedad-

Esta chistosa escena era interrumpída por un mago curativo o medico que llegaba apresurado a dónde estaban ellos.

Yuno: Es imposible... -decia este en sus pensamientos-

Médico: ¡Se encuentra el señor Asta! -decia un médico que jadeaba y jadeaba con múltiples gotas de sudor-

Asta: ¡Si! ¡Soy yo! ¿Que pasa? -hacia un lado al espíritu del viento y se dirigía hacia el médico-

Médico: No puedo describirlo con mis propias palabras... Pero... El parto se complicó y lamento decirles... Que Mimosa Vermilion se encuentra en graves problemas... -decia este con un tono impactado y de tristeza-

Asta: ¡¿Cómo?! -a este se le abrían en grande sus ojos mientras los demás estaban impactados con las palabras del médico-

Yuno: ¿Que?... -su miraba cambiaba a una de sorpresa y impacto-

Liebe: Algo no anda bien... No me da buena espina... -decia Liebe chibi en un tono serio-

Médico: ¡Así es! ¡Tiene que venir rápidamente! -decia este aún jadeando-

Asta: ¡No se diga más! ¡Vamos para allá! -asta comenzaba a correr a gran velocidad en dirección a la habitación donde estaba su novia mientras que detrás de él le seguía Yuno-

Ya en la habitación donde estaba haciendose el parto...

Mereoleona: ¡Vamos Mimosa da todo de ti! ¡Demuestra por qué eres una Vermilion! ¡Ya casi está cerca la niña, logro ver su cabeza! -decia Mereoleona Vermilion en tono de motivar a Mimosa para que siguiera pujando-

Nero: ¡Tu puedes! ¡No te detengas! -decia Nero que estaba ubicada en la parte íntima de Mimosa, para lograr sacar al bebé si este salia por completo-

No existe guía para ser padreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora