Una noche sin sueño. LawxZoro

Sueño oh realidad

En una noche silenciosa, Law yacía en un sueño profundo, su cuerpo hundiéndose en las profundidades del océano. El peso del agua era insoportable, aplastando su pecho y haciéndole imposible abrir los ojos.

Luchaba con todas sus fuerzas, pero sus pensamientos solo lo arrastraban más hacia abajo. La oscuridad se cerraba sobre él, sofocándolo. En su desesperación, un solo nombre acudió a su mente: Zoro.

En ese mismo instante, en otro lugar, Zoro estaba profundamente dormido, sintiendo el peso de la soledad en su alma. En sus sueños, veía a Law hundiéndose en el fondo del mar, su cuerpo inerte flotando a la deriva.

Un escalofrío recorrió la columna vertebral de Zoro, despertándolo abruptamente. Se sentó en la cama, su corazón latiendo con fuerza. Sabía que algo estaba mal con Law.

Sin dudarlo, Zoro se apresuró a la orilla del mar. Las olas rompían contra la arena, creando un ritmo inquietantemente familiar. Cerró los ojos y se concentró, intentando sentir la presencia de Law.

Para su horror, descubrió que Law realmente estaba hundiéndose en el fondo del mar. El peso del agua lo estaba ahogando, arrastrándolo hacia un abismo sin fin.

Zoro no perdió tiempo. Se zambulló en las oscuras profundidades, su cuerpo cortando el agua como un cuchillo. Nadó frenéticamente, impulsado por una determinación inquebrantable.

Finalmente, encontró el cuerpo inerte de Law, flotando a merced de las corrientes. Zoro lo agarró desesperadamente y lo llevó a la superficie.

Con manos temblorosas, Zoro bombeó el pecho de Law, suplicándole que volviera a respirar. Para su alivio, después de unos minutos eternos, Law tosió agua y abrió lentamente los ojos.

En ese momento, Zoro sintió un amor y una gratitud inconmensurables por su compañero. Había arriesgado su propia vida para salvarlo de las profundidades del océano.

Y así, en esa noche silenciosa, el vínculo entre Law y Zoro se hizo más fuerte que nunca, un testimonio del poder indomable del amor y la amistad.