Cristal
Eso no me lo esperaba
Me quedé en silencio sin saber que más responder
—¿A donde iremos? — le pregunto al pelinegro
Espera.... ¡ni siquiera quiero estar cerca de ellos!
—Fuera de aquí, camina — me toma del brazo y empezamos a caminar fuera del salón, todas las miradas estaban sobre nosotros, incluida la de dos ciertas reinas
—Estan murmurando — le dije al pelinegro
—No me importa — contesta tajante
—No quiero que piensen que soy algo tuyo, algo de ustedes — le informo mientras que seguimos caminando por los largos pasillos para alejarnos de todas esas personas
—Y si lo piensan que, ¿armaras un escándalo? — suelta frívolo
—Si es necesario lo armare, no quiero tener nada que ver con alguno de ustedes y menos que las personas se imaginen cosas que no son — suelto
—Ademas, yo no sería la afectada sino ustedes, ¿no te importa que existan ese tipo de rumores? — estamos a punto de salir del palacio
—¿Ese tipo de rumores? — repite
—Que tienes una amante, es lo que diste a entender allí dentro — contesto
—Te he dicho que eso no me importa, además — frena y se voltea buscando la atención de mis ojos
—Si los rumores son contigo, que hablen tanto como les plazca — me sonríe y vuelve a jalarme la mano para seguir caminado
Llevamos caminado unos 10 minutos y lo único que he visto es puro bosque
—¿Se puede saber a donde demonios vamos? — le pregunto al hombre que se encuentra caminando velozmente delante de mí pero este me ignora una vez más
—Belial
—¿A donde demonios vamos? — repito
—A las fronteras — contesta
¿Acaba de decir frontera? este está loco
—¿Estas loco? — freno en seco y el también, se da la vuelta, su mandíbula se encuntra tensa
—La frontera no quedan muy lejos de aquí, debemos llegar lo antes posible si no es tanta molestia ¿cres que puedas dejar las preguntas para después? — habla con irritación en sus voz y sigue cambiando sin rumbo, para mi parecer, pongo en marcha mis pies que ya no dan más, putos zapatos del demonio
Cómo quisiera darle un guantazo ¿me hablas así después de todo?
—Espera — dije sin poder más
Suelta el aire
—¿Ahora que?
Dios mio perdoname por lo que voy a hacer, Ashly no me mates
Rasgo el vestido desasiendome de la fina capa de velo que cubría mis piernas quedando con la pieza de debajo, me agachó y me desago de los tacones sosteniendolos en la mano
—Mucho mejor, ya podemos seguir — dirijo mi mirada al pelinegro que me mira fijamente, tiene un brillo extraño en los ojos
Seguimos caminando por unos 20 minutos más
¡Necesito aguaaa!
La necesito porfavor
—Oye — me dirijo al pelinegro, a quien más sino
ESTÁS LEYENDO
12 O'clock: A través del tiempo
RomanceSoy de la personas que creen que la vida puede cambiar en cuestión de instantes, que no importa cuanto te esfuerces en no cambiarla, un giro inesperado que te dé el destino y todo se va por el tragante, soy víctima de estos giros de 360 grados, un d...