23- El angel caído.

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Había pasado tan solo una hora desde lo ocurrido. Haru se encontraba perdida en sus pensamientos, perpleja ante lo sucedido. ¿Cómo es que alguien como Angel, a quien apenas conocía por palabras de Rouis, se había dado el lujo de salvarla? ¿Cómo un ser que es considerado el último de su especie había arriesgado su vida por una coneja cualquiera?

Sus pensamientos eran un torbellino en aquella tortuosa noche. De pronto, pudo sentir que alguien la llamaba. Al darse cuenta, Legoshi estaba ahí, habiéndola encontrado.

Legoshi (suspiro aliviado): Haru!, me alegra que estés a salvo. Tenemos que volver a la academia. Durante el apagón dispararon y ahora estar aquí no es seguro.

Antes de que Legoshi pudiera continuar, Haru lo interrumpió.

Haru(angustiada): Se lo llevaron...

Legoshi frunció el ceño, sin entender.

Legoshi: Uh?, ¿Quién se llevó a quién?

Haru, con la voz temblorosa, explicó lo sucedido.

Haru: No se que estaba pasando, no podía ver nada, no estaba siguiendo y cuando intentamos huir... Todo empeoró

Ante lo escuchado Legoshi solo escuchaba lo que decía, entonces esa es la razón por la que estaba tan lejos del parque, además, había distinguido un olor aparte del de la coneja.

Legoshi: E-Entonces... El otro olor pertenecia a, Angel...

Legoshi se quedó perplejo. ¿Qué debía hacer? Angel estaba en peligro, pero la oscura noche los obligaba a volver a un lugar seguro. Apenas podía distinguir el olor de Angel entre la multitud y no sabía quiénes habían sido los responsables.

Haru: El me salvó, Pero a qué costo...?

Legoshi solo trago su saliva ante lo que escuchaba, que podía hacer ahora, aunque fuera a buscar a angel, no podía simplemente dejar a Haru ahí o llevarla para encontrar al humano.

Legoshi (con determinación): Primero debemos volver a un lugar seguro y avisar a la academia o alguna autoridad. No podemos andar deambulando sin saber exactamente dónde buscar, todo esto... Es realmente complicado.

Aunque le doliera no poder hacer nada en ese momento, sabía que avisar a las autoridades era la mejor opción. Sin más, ambos descendieron de la azotea. Pero Legoshi no podía deshacerse de la amarga sensación de volver sin hacer nada, rogando que Angel estuviera bien al menos hasta que pudieran hacer algo.

Aunque poco sabían que una vez que llegaran a la academia, el director Gon no dejaría salir a nadie esa noche hasta al amanecer, incluso si el guardia de la academia tiene que intervenir de ser necesario.
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En otro lugar desconocido.

Angel abrió lentamente los ojos, la oscuridad de la sala solo era rota por tenues luces que se filtraban desde una ventana cubierta. Sus manos estaban atadas con cadenas gruesas y pesadas, y al intentar moverse, un dolor punzante recorrió su pierna herida. Al levantar la vista, vio a un grupo de leones, aproximadamente treinta y cinco, que lo observaban con una mezcla de curiosidad y avidez. En el centro de la habitación, un león de imponente presencia, que claramente era el líder, lo miraba como si fuera una reliquia rara y valiosa.

Lider: (Con voz profunda y calmada) Así que tú eres el famoso humano de Cherryton. No pensé que tendría la oportunidad de ver algo tan... especial, no tan Serca.

[Beastars Fanfiction] The Last "Human"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora