Empieza a grabar - Chestappen

Único

La cabeza de Max taladraba constantemente con la idea que tenía en mente.

Desde hace unos días había considerado decirle a Sergio, pero su vergüenza y su miedo al rechazo era su gran obstáculo.

Por un lado había la posibilidad de que Sergio aceptara e hicieran una de las cosas más calientes de su relación.

Pero por otro lado corría con el riesgo de Sergio le gritara que era un pervertido y le aventará algo a la cabeza para después salir furioso del departamento.

Bueno probablemente eso podía no ser posible, Checo jamás explota o se atrevería a tirarle algo.

Pero el miedo seguía ahí.

Carlos y Charles lo habían impulsado de que no había nada que temer. Ellos mismos lo habían platicado y le dijeron que solo era comunicación en pareja.

Claro, al principio se había sentido perturbado de saber lo que sus amigos hacían, pero todos sus pensamientos se dispersaron al imaginar a su pecoso y a él en la misma situación.

Por lo que en el descanso de verano, después de una calurosa tarde en Puerto Vallarta, finalmente decidió abrir la conversación.

—Oye, Schat —Max llamó cuando salía del baño.

Checo se encontraba acostado en la cama, leyendo un libro con unos lentes que siempre lo hacían ver más atractivo de lo normal.

Lo volteo a ver con esos ojos brillantes y grandes, haciéndole saber que le prestaba atención.

—¿Podemos hablar de algo?

Checo cerró su libro y lo colocó encima de la mesita de noche, justo después se quitó sus lentes y los colocó sobre su libro.

—¿Pasó algo?

—No exactamente—murmuró—. Es solo que...bueno, últimamente he tenido un pensamiento, pero quiero saber qué opinas tú.

—Está bien—se acomodó en la cama, dejando ver sus piernas jugosas que amaba tomar y enredar en sus caderas—¿De que va?

—Bueno, tú sabes que te amo mucho y que te aprecio como no tienes idea, que me has ayudado en mucho, no solo como compañero y en la pista, si no también como pareja y en toda mi vida me has ayudado y-

—Max. Me estás asustando. ¿Vas a terminar conmigo?

—¡¿Qué?! ¡No!—exclamó horrorizado— Claro que no, Liefde, déjame terminar, ¿si?

Checo asintió.

—Bueno, sabes que ambos tenemos necesidades cuando estamos lejos del otro no, ¿no?

Checo volvió a asentir. Sus pensamientos no iban a buenos lugares, realmente lo único que pensaba es que Max le iba a pedir una relación abierta, pero tenía que esperar a que terminara para saber que se traía entre manos.

—Y no podemos vernos, así que estuve pensando en que sería buena idea si...bueno... grabábamos algunos de nuestros encuentros y que eso nos ayudará en momentos así—terminó de decir en voz baja y soltando un gran suspiro.

Max bajó la mirada, esperando algún grito por parte de Sergio, ya fuera de felicidad o de furia, sin embargo nada de eso llegó.

La habitación se encontraba en silencio y sin ningún movimiento, y por curiosidad, volvió a mirar a Checo, quien seguía mirándolo de la misma manera.

—Déjame ver si entendí. ¿Quieres grabarnos mientras tenemos sexo?

"Si bueno, eso era más fácil de decir" Max pensó por sus adentros.