Mes SasuSaku 2024

Día 26 | No somos compañeros

Puedes acompañar el escrito con la siguiente canción:

🎵「https://www.youtube.com/watch?v=JeWp0E41KiQ」

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El lugar se sentía solitario, un paraje desolado que reflejaba sus almas solitarias. Engañando a Kakashi y a Tsunade, ya que Naruto aún se encontraba de viaje de entrenamiento, Sakura había buscado a Sasuke durante días. Finalmente, luego de sobornar a uno de los secuaces de Orochimaru, lo encontró en un claro silencioso, rodeado por árboles altos y oscuros que parecían susurrar secretos.

-Sakura, al final sobornaste a la persona indicada.

-¿Cómo lo sabes...?

-¿Sorprendida? -El Uchiha sonrió-. Yo sé todos tus movimientos; al fin y al cabo, es una costumbre de Orochimaru conocer a mis viejos compañeros. Pero eso no es lo importante. -habló minimizando las acciones de su maestro-. ¿Qué es lo que quieres?

-Tú y yo ya no somos compañeros -musitó la pelirrosa, su voz quebrada pero firme mientras trataba de evitar esos ojos rojos que tanto la atormentaban.

Sasuke levantó la mirada lentamente, una sonrisa irónica curvando sus labios pálidos.

-¿Eso es todo lo que querías decirme? -respondió con un tono cargado de desdén-. Es curioso, creí que me habías hecho una promesa. Entendería que ya la olvidaste.

Hizo una ligera reverencia, una burla manifiesta que sólo logró encender aún más la furia en el pecho de Sakura.

-No te burles.

-Ya debo irme, molestia -gruñó aún con un tono burlesco en su voz-, pero para tu tranquilidad, yo jamás te consideré mi compañera.

-No lo hagas, no te atrevas, Sasuke Uchiha -habló entre dientes, cada palabra impregnada de rabia contenida.

Sakura estaba enojada, no solo por la actitud de Sasuke, sino también porque se sentía culpable. Había pasado varios días engañando a Kakashi-sensei y a la Quinta Hokage, ocultando sus verdaderas intenciones de encontrarse con él. El peso de sus mentiras le pesaba, pero no tanto como la actitud mordaz y cruel del chico que amaba.

-¿Qué esperabas, Sakura? -La voz de Sasuke era un cuchillo afilado-. Los dos somos ninjas y nuestras lealtades deben ser claras.

-Nunca esperé que fuera fácil, Sasuke. -Sakura apretó los puños, sus uñas clavándose en la palma de sus manos-. Pero tú... tú estás dejando que el odio te consuma. No puedo quedarme de brazos cruzados mientras te pierdo más y más.

-¡No sabes nada de lo que siento! -estalló Sasuke, su Sharingan brillando intensamente-. Mi camino no tiene lugar para tus sentimientos o tu comprensión. Solo hay una cosa que me importa, y es vengar a mi clan.

Las palabras de Sasuke eran como un veneno, cada una penetrando profundamente en el alma de Sakura. Pero ella no retrocedió. Sus ojos verdes lo miraron con determinación, incluso cuando las lágrimas amenazaban con derramarse.

-¿Y qué pasa con nosotros, Sasuke? -preguntó ella, su voz temblorosa pero resuelta-. Del vínculo que formamos, ¿ya no significa nada para ti?

-¿Vínculo? Es algo que decidí romper. Me estaban contaminando.

Sasuke se quedó en silencio por un momento, su expresión endurecida. Aun así, recordaba esos días en el Equipo 7, las misiones, las risas, los momentos de camaradería. Pero esos recuerdos parecían pertenecer a otra vida, una vida que ya no reconocía como suya.

-No te creo.

-¿Y crees que eso me importa, Sakura? -finalmente respondió, su voz más baja, pero no menos fría-. Ahora solo me importa el camino que elegí. No puedo permitirme debilidades. -La miró con su Sharingan encendido sin utilizarlo.

Sakura dio un paso hacia atrás, tratando de desviar su mirada. Sentía que estaba caminando sobre una cuerda floja, pero no podía rendirse ahora. No cuando aún había esperanza, por mínima que fuera.

-Sasuke, no eres débil por tener sentimientos -dijo con suavidad-. Eres humano. Y los humanos necesitamos a otros. Necesitamos amor, necesitamos amistad. No tienes que enfrentar esto solo.

El Uchiha soltó una risa amarga, sacudiendo la cabeza. Para él, esas palabras eran solo una distracción, un eco de una vida que había decidido dejar atrás.

-Sakura, no puedes salvarme. Ni siquiera puedes salvarte a ti misma de este dolor.

El rechazo en sus palabras era palpable, pero Sakura no retrocedió. Sabía que Sasuke estaba luchando con sus propios demonios, y aunque parecía inalcanzable, ella no podía simplemente rendirse.

-No puedo salvarte, Sasuke -respondió ella, su voz firme-. Pero puedo estar aquí. Puedo recordarte quién eres. Porque yo aún creo en ti; y seguro que Naruto y Kakashi-sensei piensan igual que yo.

-¡Lárgate! -ordenó-. No quiero lastimarte, por lo menos aún no -confesó con una sonrisa que le causó escalofríos.

-¡No! No voy a rendirme, Sasuke -afirmó ella, dando un paso más cerca-. Y sé que, en el fondo, tú tampoco.

-Eso es lo que tú crees. -En esta ocasión utilizó su Sharingan para hacerla dormir.

La cargó y la observó con detenimiento.

-¿Y ahora qué, Sasuke? -preguntó Suigetsu saliendo de un charco de agua.

-La regresaremos al lugar donde la encontraste.

Suigetsu se sorprendió y decepcionado. -Ella es una ninja médico entrenada por la actual Hokage.

-Lo sé -habló Sasuke mientras se dirigía a la posada-. Yo mismo te lo dije.

-Sí, claro. El perr0 de Kabuto es un buen espía -reflexionó-. A Orochimaru le podría interesar si la llevas ante él.

-No. -Sasuke gruñó, pero continuó caminando. Suigetsu, siendo un tipo inteligente, comprobó una vez más que la mascota consentida de Orochimaru tenía un pasado con esta chica y él quería saber.

-Es una chica muy linda, yo podría ayudarte a llevarla. -Colocándose frente a él y estirando sus brazos para cargarla-. Así tú podrías seguir con tu entrenamiento -sugirió.

Sasuke ni se inmutó, solo lo hizo a un lado. Suigetsu parecía decepcionado porque sus suposiciones fueron erróneas, pero a la vez alegre pues Sasuke le dará a la chica. Tal vez podría divertirse un poco con ella.

-¿Sasuke?

-Camina y guarda silencio. No me hagas hacer algo que no quiero -declaró, mirándolo a través de su Sharingan.

-Ese truco ya lo he visto. No me asustas, Sasuke. -Levantó los hombros.

Sasuke por fin se detuvo. -Suigetsu... -y esta vez no solo lo miró, sino que activó su Sharingan, haciendo que Suigetsu hiciera lo que él le ordenó. Incluso le dijo que olvidara todo cuanto había visto y oído ese día.

Sasuke, satisfecho por el silencio, bajó la mirada para observar a Sakura de una manera dulce, murmurando una frase poco inteligible: -Siempre te estoy causando problemas, Sakura...

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26.07.2024

Espero les haya gustado.
Les agradezco mucho por regalarme un poco de su tiempo, su apoyo y sus comentarios.

Un abrazo, Gali.