Lisandro me habia dicho que hoy, viernes habia una joda porque cumplia 17 años, obviamente donde me dicen joda, alcohol y música, yo voy.
Estaba esperando que me pasen a buscar, tenia que venir Julián y Lupe. Fui al espejo y me saque fotos para subir a una historia.
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enzojfernandez ha respondido tu historia: Les mando un beso a las tres😉
Ignoro dicho mensaje, aunque admito que me hizo esbozar una sonrisa, el es tan.... nose, tiene algo.
Lupita: Dale amiga salii
(...)
Llegamos a la joda, estaba explotadisima. Era obvio, nuestro grupito era el mas popular por asi decirlo, eramos muy sociables y teniamos banda de amigos, aparte que somos re copados. A lo lejos veo a Teo, el hermoso de 5to Sociales, esta más bueno que comer pan con la mano, lastima que tiene novia. Voy hacia la barra en busca de una cerveza, en el camino no puedo parar de pensar en Enzo, en los mensajes, en esa noche.
Si hay algo que sabían todos era que Enzo no tenia buena fama con las mujeres, muchas chicas de otros cursos corrieron la bola de que era un gato, un pajero que solo ilusionaba a las minas, que te garchaba y al otro día te bloqueaba. Un imbecil.
Es por eso que tengo miedo, ya me lastimó una vez y no tengo ningún argumento para volver a confiar.
enzojfernandez te ha enviado un mensaje.
Enzojfernandez: bájate esa pollera que mucho tiempo mas no se si voy a aguantar
pajero.
Apague el celular y me enfoque en disfrutar esta noche, estuve muy pensativa esta semana y la verdad que no estaba con muchos ánimos, prefiero pasarla bien hoy sin nada de problemas, sin nada de chicos, sin nada de "amigas" y sobre todo, sin nada de Enzo.
(5:04 A.M)
Estaba en el medio de todo el barullo de gente que se había formado en el reducido patio de Lisandro, ya no sabia que estaba haciendo, mi vista estaba nublada y solo dejaba que mi cuerpo de soltara al ritmo de la música, con los pelos alborotados, gusto a distintas variedades de alcohol mi boca y olor a cigarrillo decido ir al baño.
Me tambaleaba por los pasillos de la casa, me tenia de los muebles para no caerme hasta que mi vista enfocara para encontrar un baño cercano. Al entrar me siento en el inodoro bruscamente y mientras hago lo mío tocan la puerta bruscamente.
-Ocupado- Digo arrastrando la voz.
Vuelven a tocar aun mas fuerte.
Me levanto rápido, me limpio y me acomodo la ropa para luego abrir bruscamente la puerta y encontrarme de espaldas a una morocha cuya silueta conocía bastante bien.
-¿¡Encima de taradita sos sorda!?- Dijo
-Que te pasa mogolica, toca para afuera dale.
-A ver córrete- Me empuja y entra al baño azotando la puerta.
Unas ganas de entrar al baño y meterle la cabeza en el inodoro a la boludita esa, la odio. Julieta es el tipo de mina que con solo verla, escucharla hablar y saber que simplemente existe soy capaz de tener una tendencia asesina.
Me voy para afuera nuevamente y me pongo en una esquina así me relajo, no soy boluda y soy consciente que tengo un pedo bárbaro.
A los 5 minutos aproximadamente veo como la inmadura de Julieta se acerca a Enzo y lo abraza mientras le dice cosas al oído, solo bastaron 2 minutos para que el difícil de Enzo (nótese el sarcasmo) se la empiece a comer y encima enfrente mío.
Sentía una impotencia impresionante, mi mente se nublo de distintos escenarios en mi cabeza y todos terminaban con Julieta golpeada, el tiempo paso bastante rápido y siento como me tocan el hombro, dios mío. ¿Esta piba no se cansa? Se esta ganando una buena piña.
-Para que veas linda que vos no tenes un mínimo de chance- Dijo la muy pelotudita.
Empezó a decirme tantas cosas que yo no comprendí, estaba en cualquiera. Aunque solo con los gestos que hacia su cara y sus manos pude darme cuenta fácil que cosas buenas no eran.
No dejes para mañana lo que podes hacer hoy decía mi abuela. Y cuanta razón tenia.
De repente estábamos en medio del patio rodeadas de gente que miraba la escena como si fuese un espectáculo, le tire una piña en la cara y sentí una adrenalina recorrer todo mi cuerpo mientras ella retrocedía un par de paso, pero no se quedo atrás y se acerco para intentar agarrarme el pelo de un manotazo que esquive justo a tiempo. Intento agarrarme el cuello y le agarre con mi mano completa la colita con gel que tenia y la empecé a zamarrear de un lado al otro, la pelea siguió hasta que unas amigas de Antonella se acercaron para alejarla. Al final ambas nos fuimos con un par de moretones y rasguños.
