Jimin se sorprendió ante las palabras de Jungkook, su corazón se aceleró en el acto. Él lo miraba con ojos ligeramente abiertos, como si no esperara esa declaración de su parte.
- ¿Perderme? – Preguntó él en voz baja, con un tinte de sorpresa aún marcada en su voz. Él intentó bajar un poco la cabeza, pero el agarre de Jungkook en su barbilla se lo impidió.
- Sí. No quiero perderte. – Repitió él, con una confianza y seguridad en sus palabras. Él lo estudió unos segundos más, mirando los ojos sorprendidos de Jimin, captando cada emoción y pensamiento pasando por su mente en ese momento.
Jimin intentó procesar lo que Jungkook estaba diciendo. Nunca se imaginó que él estuviera preocupado por "perderlo" o que estuviera tratando de mantenerlo cerca. La sinceridad y las palabras de Jungkook lo golpearon con fuerza, desarmando un poco las barreras que había construido a su alrededor.
- ¿Por qué? – Preguntó él con voz suave, aun sin comprender del todo lo que pasaba por la mente de su jefe. Él intentó volver a bajar la cabeza, pero la mano de Jungkook en su barbilla lo mantuvo en su lugar.
- Porque me importas. – Respondió él simplemente, con una sinceridad que sorprendió incluso a él mismo. Él no estaba acostumbrado a expresar sus sentimientos de esa manera, por lo general se mantenía distante y en control de sus emociones.
- Y... no quiero que te alejes. – Añadió él con voz algo más suave, mostrando un atisbo de vulnerabilidad en su habitual fachada impenetrable.
Jimin sintió cómo su corazón se llenaba de un sentimiento extraño y familiar a la vez. Era una mezcla de sorpresa, emoción y ternura que lo dejó sin palabras por unos segundos. Él no sabía qué responder, pero no pudo evitar sentir una punzada de felicidad y calidez en su interior.
Él intentó controlar un temblor que amenazaba con pasar por su cuerpo, pero no pudo evitar que sus emociones se reflejaran de alguna manera. Él levantó una mano y tomó el antebrazo de Jungkook, sujetando suavemente el pulso que se apresuraba bajo su piel.
- No me iré a ningún lado. – Respondió finalmente él, manteniendo la mirada firme pero suave en la de Jungkook. No podía negar que esas palabras lo habían tomado por sorpresa, pero también habían tocado algo en su interior que no sabía que necesitaba.
Jungkook se quedó callado por un momento, analizando la expresión y el gesto de Jimin, buscando cualquier señal de mentira o duda. Pero sólo encontró honestidad y vulnerabilidad en sus ojos, lo que le causó una especie de alivio en el pecho.
Él movió la mano de la barbilla de Jimin a su mejilla, acariciándola lentamente con su pulgar. Él pudo sentir cómo la piel de Jimin se calentaba con su toque y cómo él se inclinaba un poco hacia el contacto, buscando inconscientemente más.
Él no pudo evitar notar cómo los ojos de Jimin se cerraban ligeramente ante el gesto, cómo su rostro se relajaba debajo de su toque. Él sintió otra punzada de emoción en su interior, la necesidad de asegurarse de que Jimin realmente estaba ahí y no iba a irse.
Jungkook se inclinó un poco más hacia Jimin, acortando la distancia entre ellos. Él siguió acariciando suavemente su mejilla mientras lo miraba a los ojos con una mezcla de ternura y deseo, y luego, de manera lenta pero segura, se inclinó y presionó sus labios contra los de él en un beso tierno y lleno de amor.
El gesto sorprendió un poco a Jimin, pero él no se resistió y se dejó llevar por la calidez de los labios de Jungkook. Su cuerpo se relajó instantáneamente, y él respondió al beso con suavidad, permitiéndose derretirse en el momento.
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"Sombras y Silencios: El asesino y el mafioso" | Kookmin
FanficPark Jimin era un asesino contratado por Jeon Jungkook (un mafioso) Jimin era uno de los mejores en su trabajo y se había hecho un nombre en ese mundo, era respetado y temido por muchos. El jefe de Jimin, Jungkook era un hombre misterioso y que siem...